El Paraíso es un pueblo tranquilo. Casi que no pasa nada. Al menos, es ésa la sensación que desprende el calor que agobia al comisario del pueblo, con un ventilador que apenas le arrulla un vientito. Pero una serie de circunstancias empiezan a entretejer algo. La calma del lugar no es la misma de siempre. Sólo un lugareño podría sentirlo. Será cuestión de atar cabos y seguir la pista. Algo macabro espera.

Con esta premisa se desenvuelve El Paraíso, cortometraje que dirige Ricky Piterbarg, con guión y protagónico del rosarino Agustín Rodríguez. El guión de Rodríguez resultó ganador del premio Mejor Guión del concurso Historias Contadas por Actores que entregó la Fundación SAGAI (Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes) en 2015, y ahora participa del Festival de Cine Latinoamericano de La Plata (FESAALP) en la categoría Cortometrajes/Ficción. Puede verse online en la plataforma de OctubreTV durante los días del festival, que inició ayer y se extiende hasta el 05 de diciembre.

Afiche de El Paraíso.

La idea surgió a raíz de una conversación que mantuve con mi papá, que tenía un proyecto que transcurría en Puerto Gaboto. El remate del corto surgió de allí. Yo tomé eso y lo escribí como un cuento corto, que en verdad no me gustó cómo había quedado. Luego llegó a mis manos el concurso SAGAI. Como la historia sucedía en Puerto Gaboto, el cuento se llamaba así. Pero por una cuestión de logística, con el director decidimos movernos a la localidad de Ramallo, donde contábamos con un grupo de gente y de contactos que nos podían ayudar a simplificar mucho la realización. Además de guionista y actor, también lo produje, así que ése fue un factor importante para movilizarnos allí, con gente que iba a ser de una ayuda muy grande. Tomamos también la decisión de utilizar actores y recursos de la zona para de alguna manera devolverle un poco al lugar”, explica Agustín Rodríguez a Rosario/12.

“Después de ganar el concurso lo que hice fue presentarme al Incaa para Historias Breves, pero no quedamos. Económicamente se volvió complicado a partir del 2015. Hasta que una tarde me decidí, lo llamé al director y le dije que lo financiaba yo mismo. Quienes trabajaron lo hicieron prácticamente ad honorem, y el grupo técnico se redujo. Lo hicimos muy a pulmón, con la onda de la gente. Pero a la mayoría le había gustado el guión, y eso fue algo muy importante para mí. Todos reaccionaron de esa manera, quisieron hacerlo y se movilizaron hasta El Paraíso, a Ramallo. La gente que fue de Buenos Aires tuvo que hacer un esfuerzo, durante cuatro días de rodaje. Empezamos a filmar un viernes y el martes anterior habían decretado alerta meteorológico para ese día. Habíamos decidido no filmar si llovía, porque la historia se convertiría en otra cosa. Pero llovió el último día y las cosas se fueron dando bien. Ahora estamos participando del FESAALP y presentándonos en otros festivales”, continúa.

Es oportuno incluir la valoración que del guionista y actor hace el director Ricky Piterbarg, incluida en la presentación del corto en el FESAALP: “La convocatoria de Agustín Rodríguez es una más de las aventuras audiovisuales que encaramos juntos en varios años. Su escritura, su humor y su mirada, siempre me estimularon y me completan en aspectos que yo carezco a la hora de diseñar una historia. El Paraíso me llevó a recordar mi segundo cortometraje en el que me metía en el mundo de la gente común de campo, eso me sedujo una vez más, y me propuse hacer un abordaje de la tragedia despojada de cualquier observancia existencial”.

En El Paraíso es notable la construcción del espacio, similar a la de esos pueblos genéricos y rurales tan vistos en algunas series y películas norteamericanas. Pero desde una idiosincrasia local. “Cuando tuve el remate, lo que hice fue ponerme a escribir el guión, y como lo estaba escribiendo de atrás para adelante, me propuse las obstrucciones que quería tener. Por un lado, quería que fuese un policial en el que la gente pudiera identificarse con el policía, algo que no sucede mucho en el cine o el audiovisual argentino. Venía viendo True Detective y me preguntaba: ¿cómo es que en un pueblo de Massachusetts bajan marcianos y los detectives están al nivel de los que viven en Nueva York? Son todos capos. Me propuse eso. También que el clima fuese un factor. Y me pregunté cómo hacer al policía de una manera atractiva para el público. Pensé en Columbo, en la mujer policía de Fargo, en esos policías que no sabés si lo entienden todo pero sin embargo ordenan lo que sucede y logran descubrir el asunto”, concluye.

El Paraíso cuenta con fotografía de Germán Costantino, dirección de arte de Loli Cavasassi, sonido de Mariana Delgado y Tomás Portías, montaje de Roly Rauwolf, y música de Bárbara Togander. El elenco lo integran Agustín Rodríguez, Pedro Oviedo, Ayelén Solís, Fabián Idiart, Arminda "Chiqui" Enríquez, Guillermo Soffiantini, Almendra Andematten.

Otra buena nueva para el cine local es la selección de El Laberinto de las Lunas, de Lucrecia Mastrángelo, en el 42º Festival Internacional de Cine de La Habana. El documental de la realizadora rosarina estará compitiendo del 3 al 13 de diciembre en la sección denominada “Los Colores de la Diversidad”. Además, la película será emitida por la Televisión Cubana el 11 de diciembre en el marco de una programación especial que funcionará, de acuerdo con el criterio de la entidad, “como extensión a las demás provincias del país y, por otra parte, a manera de compensar las limitaciones en la asistencia del público a los cines impuestas por las regulaciones sanitarias a causa de la pandemia de covid-19”. Un detalle precioso lo significa el título del espacio televisivo: “Tierra en trance”, en alusión al film del maestro brasileño Glauber Rocha. También se verán allí otros títulos previstos en el festival, en la compañía de críticos especializados junto a la presentación de sus directores y directoras.