El Gobierno italiano adoptó un decreto ley para restringir la movilidad dentro del país durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, como parte de un paquete de medidas para combatir la propagación del coronavirus. Las nuevas medidas adoptadas a partir de este jueves se dan en momentos donde Italia registró este jueves su peor dato en lo que a fallecidos se refiere desde el inicio de la pandemia, con 993 muertes en 24 horas.

Según informó el Ministerio de Salud, ese día se contabilizaron además otros 23.225 contagios de entre los más de 226.000 test efectuados, un dato en línea con días anteriores aunque ligeramente superior, reportó la agencia de noticias Europa Press. Con ello, la pandemia deja ya en Italia 1.664.829 contagios confirmados y 58.038 víctimas mortales desde que se detectó el primer caso a finales de febrero. Y la tasa de contagios roza el diez por ciento de los testeados.

El decreto firmado por el primer ministro Giuseppe Conte prohíbe trasladarse de una región a otra entre el 21 de diciembre y el 6 de enero de 2021, excepto por motivos de salud o laborales, informó la agencia de noticias AFP. El país está dividido en veinte regiones que el Gobierno ha clasificado por colores de acuerdo a tres niveles de riesgo de contagio: alto, intermedio y moderado. Los viajes a las regiones con una situación epidemiológica grave, clasificadas rojas, ya estaban prohibidos. Por otra parte, los días 25 y 26 de diciembre, así como el 1 de enero, estará prohibido desplazarse fuera del propio municipio, salvo por motivos de salud y laborales. 

Italia, el primer país afectado por el coronavirus en Europa, registró hasta ahora más de 56.000 muertes, y el Gobierno teme una tercera oleada después de las vacaciones de invierno si no se toman medidas estrictas. Según el Ministerio de Salud, la pandemia dejó en Italia 1.620.901 contagios y 56.361 defunciones. El pico del segundo brote parece superado sin que haya sido necesario confinar a todo el país. 

El premier Giuseppe Conte tiene previsto firmar durante la jornada un decreto ley más detallado en el que, según los medios italianos, renovará el toque de queda vigente en todo el país entre las 22 y las 5. Hasta ahora los restaurantes y bares pueden abrir hasta las 18, mientras que los cines, teatros y salas de conciertos permanecen cerrados. 

Según filtraciones de la prensa no confirmadas oficialmente, el Gobierno va a introducir una cuarentena para los italianos que viajen de vuelta del extranjero durante las fiestas de fin de año y va a anunciar el cierre de las pistas y estaciones de esquí.