El 2020 parece ser el año de las sorpresas. Tal es así que, a pocas semanas de culminar, ofreció un fenómeno astronómico extraordinario que no se suscitaba desde hace 800 años: la alineación de los planetas Júpiter y Saturno —evento conocido como "la gran conjunción”— que da como resultado la famosa Estrella de Belén de las sagradas escrituras.

El astrónomo Patrick Hartigan de la Universidad Rice indicó que “las alineaciones entre estos dos planetas son bastante raras, ocurren una vez cada 20 años aproximadamente. Pero esta conjunción es excepcionalmente rara debido a lo cerca que se verán los planetas”.

La última vez que ocurrió este evento fue el 4 de marzo de 1226 y la próxima vez que ocurra será el 15 de marzo de 2080. Además, este año suma la particularidad de que la Estrella de Belén podrá apreciarse a pocos días de la Navidad, lo cual aporta cierto misticismo para los católicos, ya que el relato tradicional cuenta que esta estrella fue la que guió a los Reyes Magos hacia el pesebre donde se produjo "el nacimiento de Jesús".

¿Cuándo pudo verse?

El fenómeno comenzó a percibirse el 16 de diciembre y se pudo apreciar hasta el 21 de diciembre. La luz de los planetas provoca que la "Estrella de Belén" sea visible en el firmamento a simple vista. 

“En la noche de la aproximación más cercana, el 21 de diciembre, se verán como un planeta doble, separados por solo 1/5 del diámetro de la Luna llena”, explicó Hartigan en la previa.

Si bien estos dos planetas pueden parecer cercanos, todavía están separados por cientos de millones de kilómetros, explicaron expertos de la NASA.

¿Dónde se vio este fenómeno astronómico?

La conjunción fue visible en todo el mundo, con la mejor perspectiva para aquellos cerca del Ecuador.

“Cuanto más al norte esté un espectador, menos tiempo tendrá para vislumbrar la conjunción antes de que los planetas se hundan bajo el horizonte”, dijo Hartigan. En el Hemisferio Sur ocurre a la inversa: cuando más al sur esté una persona, menos tiempo tiene para observar el fenómeno.