La canción nace en intimidad y constituye la búsqueda con la que todo autor persigue a su propia voz. Sin embargo, sin audiencia no hay crecimiento posible para la canción y, claro está, sin un escenario que aloje a los artistas, el intercambio esencial con el público se torna un vacío difícil de resolver. Porque aún en tiempos de excesiva conectividad virtual, es en el encuentro cara a cara donde los compositores pueden constatar la efectividad de su creación, su impacto emotivo, sus falencias y virtudes. En ese contexto, en 2007 Pedro Reñé y Mario Chiappino impulsaron la primera edición del Encuentro de Hacedores de Canciones, proyecto que esta noche lanzará su 11° edición en El Aserradero de Montevideo 1518.

La programación de este nuevo Encuentro abrirá hoy con la participación de Javier "Chino" Suárez, Santiago Campos, Martín Chiappino y Giorgia Pasero, mientras que mañana será el turno de Ismael Torres, del grupo cordobés La Insurgencia del Caracol, de la bonaerense Cecilia Di Salvo y del artista mexicano Daniel Torres. Para el sábado (y siempre en el horario de las 21.30), están pautadas las actuaciones de Reñé, Luciano Jazmín, Jacinto Denis, Mery Vanborder (de Mar del Plata) y Verónica Pabón (cantautora oriunda de Colombia).

 

El cantautor Pedro Reñé, uno de los impulsores del proyecto.

 

Con sus características particulares, atravesados por realidades diversas, todos ellos se reunirán para darle forma a repertorios personales, sacando provecho de un encuentro pensado específicamente para ello. "Cuando se hizo el primer encuentro, en 2007, el objetivo fundamental fue encontrar un espacio donde muchos de los músicos pudieran tocar sus temas. En esa época muchos laburaban en boliches haciendo canciones de otros. Entonces, ante la dificultad de cantar sus canciones en esos espacios donde la gente iba a escuchar covers, se buscó jerarquizar que esa gente pudiera venir a presentar sus composiciones", recuerda Chiappino.

Después de experimentar en carne propia ese fenómeno, fue Reñé el que decidió proponerle el proyecto al titular de El Aserradero, y juntos comenzaron a delinear este Encuentro que hoy iniciará su onceava edición, que cuenta con el respaldo del Ministerio de Innovación y Cultura para solventar la llegada de los músicos de otras localidades, pero que aún sostiene su carácter independiente.

- ¿Cuál es la actualidad de la canción de autor en Rosario y la región?

- Mario Chiappino: Es una pregunta compleja. Creo que estamos en una meseta. Rosario se ha instalado hace mucho tiempo en el imaginario colectivo como una cuna de la canción de autor a partir de la llamada (o mal llamada) Trova Rosarina. Eso alentó a mucha gente a componer, pero después la propia ciudad no se hizo cargo de esa situación. Rosario hoy por hoy no tiene un desarrollo orgánico que la posicione de ese modo en la Argentina, cuando realmente tiene compositores para poder hacerlo, pero que no encuentran sus espacios. Precisamente, que surja este encuentro, de manera independiente, y los compositores vengan es porque no encuentran demasiado eco en una estrategia colectiva que incluya al Estado para poder posicionarlos. Para poder posicionar la canción rosarina en el marco nacional. No hay ni siquiera un encuentro de estas características fomentado por el Estado. Hay un desarrollo interesante de algunos compositores que han logrado trascender a nivel nacional e internacional (como Ismael Torres, o Julián Venegas, que ha participado en otras ediciones del Encuentro), pero hay muchos más compositores que me parece no encuentran un desarrollo. Sigue pasando lo mismo que años anteriores: para trabajar en bares, para poder sobrevivir como músicos, tienen que hacer canciones de otros. Salvo contadas excepciones, no hay un desarrollo de espacios, o de apoyo estatal, para que esto siga siendo un semillero. Es muy difícil para los cantautores y hay algunos que se pierden.

- Pedro Reñé: Lo que veo de la canción en Rosario es que en realidad, a lo largo de estos diez años, no ocurrió un movimiento de apertura. Hubo distintos momentos, pero ahora no veo un movimiento de apertura de espacios, más bien se han cerrado, se ven como poco rentables. Es algo un poco ligado a la crisis, a la retracción de la economía, especialmente de la economía informal. Pero también es algo ligado a fenómenos que a uno lo exceden. Porque creo que la creatividad tiene ciertos momentos históricos, lugares donde se pueden escuchar, y otros momentos donde se cierra un poco éso. En este momento las voces que pueden plantear algo desde la canción no están en su apogeo. Aún así me parece sumamente valioso hacer este Encuentro, invitando a los amigos de Rosario y a los que vienen de afuera.