Boca afrontará el miércoles próximo otra instancia decisiva en la Copa Libertadores, esta vez ante Santos de Brasil, en busca de una nueva final del torneo continental por excelencia.

El conjunto comandado ahora por Miguel Russo posee un promedio muy alto ante rivales de ese país, en series eliminatorias, que lo posicionan con muchas posibilidades. Boca afrontó 20 enfrentamientos contra brasileños en el torneo, y logró superar ese obstáculo en 17 oportunidades.

Los únicos tres duelos en los que no pudo salir victorioso fueron en la final de 1963, en la semifinal de 2008, y en el partido decisivo de 2012. La última serie que se adjudicó fue hace pocos días, cuando dejó en el camino a Inter de Porto Alegre, en una definición (5-4) cargada de dramatismo con remates desde el punto del penal.

El recorrido comenzó precisamente ante Santos, en aquel año de la década del ’60, en el que se desempeñaba nada menos que Pelé. El primer partido fue en San Pablo y el local ganó 3-2. La revancha fue en Buenos Aires y los brasileños vencieron 2-1.

Boca tuvo su desquite recién en 1977, cuando disputó la final con Cruzeiro, y se terminó consagrando en Montevideo. La ida fue en la Bombonera y el local ganó 1-0, y como en la revancha se revirtió el ganador en Belo Horizonte, se jugó un encuentro de desempate -se definía de esa manera- en cancha neutral. El partido no tuvo goles, y Boca se impuso 5-4 en los penales.

El torneo de 1991 desembocó en dos enfrentamientos ante equipos de Brasil: el primero fue con Corinthians, por los octavos de final. Boca lo derrotó 3-1 en su cancha, y luego igualaron 1-1 en San Pablo. La instancia siguiente fue frente a Flamengo: en el estadio Maracaná ganó el equipo de Río de Janeiro 2-1, pero Boca revirtió esa situación ganando 3-0 en la revancha.

Con Carlos Bianchi al frente del plantel, Boca logró el título en el 2000 derrotando a Palmeiras. Los empates 2-2 en la Bombonera y sin goles en Brasil llevaron todo a la definición por penales. Boca ganó 4-2.

El título ante Palmeiras en 2000. Imagen: AFP.

El equipo tuvo que jugar ante Vasco da Gama los cuartos de final en 2001, y ganó los dos partidos: 1-0 de visitante y 3-0 en Boca. Palmeiras apareció en las semifinales y ninguno pudo ganar. Los dos encuentros fueron 2-2, y Boca ganó 3-2 en los penales.

Boca también ganó la Copa en 2003, y allí jugó ante Paysandú en octavos de final, con el cual perdió 1-0 de local y lo superó 4-2 como visitante. La final fue ante Santos, al que le ganó los dos encuentros: 2-0 en Buenos Aires y 3-1 en San Pablo.

El adversario por los cuartos de final en 2004 fue Sao Caetano, un equipo al que no le pudo ganar. Igualaron sin goles en Brasil y 1-1 en la Boca. En los penales se impuso 4-3.

Miguel Russo ya conoce lo que es ganar este certamen con Boca, debido a que lo logró en 2007. En ese año derrotaron a Gremio en la final: 3-0 como local y 2-0 en Porto Alegre. Boca jugó ante dos brasileños en 2008. A Cruzeiro lo eliminó en octavos de final venciendo 2-1 los dos encuentros. Fluminense fue el adversario en semifinales y Boca empató de local (2-2) y perdió (3-1) de visitante.

El torneo de 2012 finalizó con Boca subcampeón. El equipo superó a Fluminense en cuartos de final, ganando de local 1-0 y empatando 1-1 de visitante. La final fue ante Corinthians, y el plantel conducido por Julio Falcioni empató 1-1 en la Bombonera y perdió 2-0 en Brasil. La revancha para Boca llegó al año siguiente, cuando eliminó a Corinthians en octavos de final: 1-0 de local y 1-1 en Brasil.

El camino de 2018, donde Boca también fue segundo perdiendo en Madrid, lo cruzó con Cruzeiro en cuartos de final, y Boca allí ganó 2-0 en su cancha y empató 1-1 en Belo Horizonte. Las semifinales fueron ante Palmeiras, y Boca ganó 2-0 en su estadio y empató en dos en Brasil. Atlético Paranaense fue el adversario en octavos de final en 2019, y Boca ganó 1-0 en Curitiba y 2-0 como local.

La última serie ante Inter completa las 20 que disputó Boca, y el miércoles próximo iniciará la 21 de su historia.