Con la intención de sostener un servicio que se encuentra en crisis, la Municipalidad dio a conocer ayer cómo será la readecuación del Transporte Urbano de Pasajeros a partir de la última semana de enero. El objetivo es claro: lograr que con los recursos disponibles mejoren las frecuencias de las líneas más utilizadas, uno de los principales reclamos de los usuarios. Para eso, se implementará un nuevo diseño para el sistema que implicará la fusión de recorridos y la unificación de líneas pero con la misma cantidad de coches disponibles. Por otro lado, el mes de febrero podría llegar con un aumento en el valor del boleto, teniendo en cuenta que actualmente presenta un desfasaje del más del 100%.

El sistema se encuentra quebrado. Así lo confesó ayer la secretaria de Movilidad, Eva Jokanovich, luego de participar de la segunda reunión de la Comisión de Seguimiento de la Emergencia del Transporte, en la que dio a conocer cuáles serán los cambios a implementar en el sistema. Un reflejo de esa definición es que antes de la pandemia los usuarios realizaban en promedio 450.000 viajes por día mientras que ahora ese número se redujo a 100.000. Esto llevado a la recaudación, implicó una pérdida aproximada de 2.000 millones de pesos.

En ese marco, la funcionario municipal explicó que durante todo el año pasado se fueron recolectando datos sobre la nueva forma de moverse que tienen los vecinos durante la pandemia y escuchando sus principales reclamos. A partir de eso, se tomó la decisión de responder el principal pedido que tienen los rosarinos que se suben a los colectivos: mejorar las frecuencias. “Si nosotros podemos resolver el problema de la frecuencia entre unidades, podemos hacer que más gente elija utilizar el colectivo y que quienes ya lo utilizan puedan tener un mejor servicio”, destacó.

Sin embargo, Jokanovich aclaró que “mejorar la frecuencia en un sistema que está quebrado es muy difícil porque no se cuentan con los recursos para seguir incorporando colectivos”. Frente a ese contexto, desde la cartera de Movilidad analizaron cuáles eran las líneas más utilizadas por los usuarios para reforzarles las frecuencias mediante modificaciones en otras líneas que eran “mucho menos utilizadas”. Teniendo en cuenta que actualmente la frecuencia promedio del sistema es de 18 minutos, con esta adecuación del transporte se busca bajarlo a 12 minutos, es decir, un reducción promedio del 35% del tiempo de espera en las paradas.

Para eso, el camino elegido es la fusión de líneas que tienen recorridos similares y que por ello se complementan para ampliar su conectividad, generando nuevas conexiones interbarriales. Según aclaró la secretaria de Movilidad, el 70% de los usuarios del sistema no van a ver cambios en la prestación diaria pero hay un 30% que van tener modificaciones en sus recorridos habituales, “lo que no significa que les va a cambiar completamente la forma de moverse”.

Los cambios se comenzarán a implementar el próximo 25 de enero. De todas maneras, toda la información sobre los cambios de recorridos y la unificación de líneas está disponible desde hoy en la página web del municipio. Al mismo tiempo, se realizarán campañas de difusión entre los vecinos, contando línea por línea que se modifica. “Estamos armando un cronograma de trabajo en todos los barrios que pueden llegar a tener modificaciones”, adelantó Jokanovich.

Otra característica que tendrá esta readecuación del sistema es que será dinámico: en la medida en que desde el municipio se observe un crecimiento en la cantidad de pasajeros, se puedan ir incorporando más unidades o modificando recorridos. “No estamos proponiendo con esto el mejor sistema para la ciudad ni uno ideal sino uno que nos permita sostenernos durante esta emergencia”, aclaró.

Al ser consultada por un posible aumento de la tarifa, Jokanovich deslizó que el intendente Pablo Javkin podría hacer uso de la facultad delegada por el Concejo para aumentar de manera automática el valor del boleto hasta un 90% de lo que indique el  estudio de costos del sistema. Teniendo en cuenta que el último informe arrojó un valor real de 77 pesos y siguiendo el ejemplo de otras ciudades del interior, el incremento podría llevar la tarifa de colectivos a un valor entre los 43 y los 45 pesos. 

El detalle de los cambios es el siguiente: 

- Líneas que no se modifican: 102 roja, 106 Ibarlucea, 133, 126 roja y negra, 128 roja y negra, 131, 132, 141, 142 roja y negra, Enlace Noroeste, Enlace Santa Lucía y Línea Q.

- Líneas que se fusionan: 115, 138 y 139; 102 negra y 144; 143, 136 y 137 roja y negra; 116 y 129; 129, 134 y 135; 122 roja y 127; 130, 146 roja y negra; 133 y 145; y 133 y 125.

- Líneas que van a mejorar su frecuencia: 103 roja y negra, 107 roja y negra, 110, 121, 123, 140, 153 roja y negra y Línea K.

- Líneas que unifican banderas: 101 y 112.

- Líneas que modifican recorrido: 122 verde.