Lo que comenzó como un control policial para evitar fiestas clandestinas en Tres  Arroyos terminó con destrozos en una comisaría y, en el medio, una emboscada contra los agentes que intentaron hacer que se cumpla la normativa sanitaria para prevenir el avance de la pandemia de coronavirus.

El “desastre” ocurrió en la localidad de Reta, partido bonaerense de Tres Arroyos, y así fue calificado por el intendente, Carlos Sánchez. “Por momentos hubo tiros. Luego de agredir, fueron a la comisaría y rompieron todo”, describió.

Todo comenzó en la madrugada del sábado, cuando agentes de la Policía Comunal de ese distrito desarticularon dos fiestas clandestinas que se desarrollaban en las playas del lugar.

En la primera secuestraron generadores eléctricos, equipo de potencia de sonido, trípodes para parlantes, una notebook y equipos de música. También luces, amplificadores y bebidas alcohólicas.

En tanto, horas más tarde impidieron que comenzara otra fiesta en los médanos entre la avenida Stella y calle 50, donde también se incautaron parlantes y bebidas alcohólicas.

La sorpresa surgió cuando recibieron llamados de denuncias por una supuesta tercera fiesta. Cuando los policías llegaron para desactivarla, aparentemente no había nada y fueron recibidos a piedrazos por personas que los esperaban. Pero todo no terminó ahí.

Otro grupo de jóvenes aprovechó que los policías estaban emboscados, fueron hasta la comisaría, que tenía poco personal, y comenzaron a hacer destrozos en el edificio. Primero con piedrazos y luego intentaron ingresar, pero el acceso fue bloqueado con muebles por los dos policías que quedaron de guardia.

"Aparentemente, por la investigación, hubo como una emboscada que le hicieron a la policía. Los llevaron hasta el lugar diciendo que ahí había una fiesta y los apedrearon. La Policía se sintió acorralada, no podía salir", relató el intendente.

La situación estaba tan fuera de control que “por momentos hubo tiros”, agregó y lamentó: “Rompieron todo, hicieron un desastre"

Luego de contener los hechos y durante un trabajo de investigación que duró hasta el día siguiente, la policía logró identificar a varios de los que participaron en las agresiones.

Carlos Sánchez dijo que por "el problema que tenemos en la Costa Atlántica de las fiestas clandestinas hacemos reuniones todos los martes los intendentes de la costa".