La Casa Gris retomó la ronda de diálogo con la oposición, en busca de pavimentar la gobernabilidad en un escenario con tantos baches y motivos para pagar costo político, en un año en donde hasta puede celebrarse nomás la elección de medio término, tal como hasta en el mismo peronismo quieren, aunque Omar Perotti prefiera suspender. Ayer fue el turno del Partido Socialista, como días atrás lo había sido la UCR. Los recibió el ministro de Gobierno, Roberto Sukerman. Y aunque la charla, de dos horas, transcurrió con la cordialidad que demanda la institucionalidad, los visitantes aprovecharon para expresar sus planteos: desacuerdo por los sondeos del Ejecutivo para alterar el calendario electoral, y por la designación como secretario electoral a un ex apoderado del PJ; queja por la costumbre de Marcelo Sain de pegarle al socialismo como el origen de todos los males de la violencia narco imperante y demanda de un plan de seguridad; también pusieron sal en la herida del plan de vacunación covid; y preguntas por el déficit edilicio de las escuelas a pesar de haber contar el gobierno con partidas presupuestarias para refacciones y que sub ejecutó.

A la cita acudieron el titular del PS y diputado nacional Enrique Estévez, y los diputados provinciales Pablo Farías, Rubén Galassi, Joaquín Blanco y Lionella Catalini. Sukerman valoró el encuentro para discutir "cuestiones que van más allá de la agenda parlamentaria". 

Farías, en diálogo con Rosario/12, contó que el primer planteo estuvo vinculado con la designación que hizo el gobernador del secretario electoral: Pablo Ayala, dirigente peronista en Rafaela, que en la última elección se desempeñó como apoderado del Partido Justicialista. "No nos parece éticamente correcto, no es personal, pero no nos parece bueno que quien deba garantizar a todas las fuerzas haya sido quien defendía los intereses del PJ", dijo.

Perotti se inclina por un año sin distraer recursos ni energías en las PASO, pero aguarda señales desde Buenos Aires, donde nada está definido aún. Los socialistas, en tanto, ayer sentaron su desacuerdo con alterar la legislación electoral tan sobre las fechas. "Cualquier modificación es pasible de sospecha de especulación electoral, modificar las reglas de juego para favorecer a algún grupo político. Seguiremos de cerca lo que pase a nivel nacional, qué alternativas respecto de la pandemia, cómo organizar para que no se acumule gente, quizás extender horario del comicio. Entendemos que los procesos electorales hay que mantenerlos. En ningún caso puede atribuirse a esto el aumento de contagios", señaló Farías.

El momento más álgido de la tertulia vino con el tema de la seguridad. Según el legislador socialista, le dejaron a Sukerman sus demandas opositoras: "Nos preocupa la falta de política, de un plan concreto, no es menor ni casual que los principales indicadores se hayan complicado en 2020. Tiene que ver con falencias que le marcamos al gobierno, y las características del ministro de Seguridad, que habla mucho y hace poco". 

Los diputados se quejaron de la pirotecnia verbal de Marcelo Sain, en especial contra los gobiernos del Frente Progresista, sobre los que dispara incluso acusaciones de connivencia con la corrupción policial y el narcotráfico. Galassi, uno de los presentes, es de los que más dardos recibe por haber ocupado el lugar que hoy ocupa Sukerman. "Somos objeto de ataques permanentes del ministro, que lejos está de tener gestión satisfactoria y mostrar resultados positivos, y en cambio se dedica a agraviarnos, también a periodistas, y que mereció el repudio del gremio de prensa", enrostró Farías. 

La conversación siguió por la inquietud de la visita acerca de la evolución de la vacunación contra el covid 19 en Santa Fe. La juzgan lenta. "Quieren vacunar a 1,2 millón de personas y con las pocas dosis que están llegando, llevará mucho tiempo, se lo dijomos al ministro", dijo Farías, y recalcó el pedido de transparencia.