Por más que admitió que pensó varias veces en el retiro, Juan Martín Del Potro no se resigna a no volver a una cancha de tenis, a pesar de que la rodilla le sigue doliendo después de todos los métodos y tratamientos a los que se sometió en el último año. Durante la entrega de los premios Konex, el ex número tres del mundo aseguró que quiere volver a la actividad y que "los Juegos Olímpicos son una gran motivación" para ese objetivo.

"Este es mi año y los Juegos Olímpicos me tiran para adelante, es una motivación que tengo. Lo tengo entre ceja y ceja y, por más que el cuerpo se ponga grande, me siento con el ánimo de afrontarlo", remarcó Del Potro en rueda de prensa desde el patio de la Ciudad Cultural Konex de Buenos Aires, donde recibió un reconocimiento por su labor en tenis.

"La realidad me marca que me está costando en la recuperación. He probado muchos tratamientos tradicionales, alternativos, y no pude volver. Desde lo emocional cuesta mucho, me duele hasta ver los partidos de tenis por televisión, trato de manejarlo lo mejor posible, tengo mis altibajos, pero todavía siento algo adentro mío y la sigo peleando", aseguró el tandilense, campeón del US Open en 2009 y finalista de ese mismo certamen en 2018.

En todo este tiempo de recuperación, luego de haber pasado por tres operaciones en la rodilla desde octubre de 2018 y con el reciente fallecimiento de su padre de por medio, Del Potro también pensó en el retiro. "En algún momento se me cruzó dejar, muchas cosas se me cruzaron. Esa opción está dando vueltas sobre mí, pero me agarró de eso que siento adentro y hoy trato de potenciar esa mínima energía positiva que tengo y no bajar los brazos, quiero volver a jugar al tenis, pero veré cómo puedo hacerlo", señaló el integrante del equipo nacional campeón de la Copa Davis en el 2016.

Del Potro, de 32 años, admitió que desde su casa observó algunos partidos de tenis "con cierto sabor amargo" porque podía haber sido parte de ello. "Cuando veo los Grand Slam y con los resultados que se dieron, podía haber estado ahí, sin dudas. Por las oportunidades que se plantearon por la pandemia en el sistema de ranking, era un momento para aprovechar", se lamentó el dos veces medallista olímpico. "Veo tenis por televisión y no me gusta, quiero estar en la cancha, darme ese gusto para terminar mi carrera el día que yo quiera y no por una cuestión de salud", añadió Del Potro.

En ese sentido, el tandilense confesó que las muestras de afecto de la gente que se cruza en la calle le sirven de motivación para intentar el regreso: "muchas personas me alientan, me quieren ver jugar, me dicen que no baje los brazos y tiene un doble significado porque tiene un lado emocional, que me duele pero me agarro de esa energía para no bajar los brazos". Además, también indicó que tras el fallecimiento de su padre a principios de enero, el eventual regreso sería para su madre y hermana. "Hace poco perdí a mi papá y me estoy acomodando a recuperar mi vida normal y con mucha ilusión de volver al tenis, aunque me cuesta y la rodilla me falle mucho, pero todavía no puedo cerrar mi historia, siento que tengo algo más por dar entonces lo sigo intentando. Ese momento me lo merezco por la carrera que tuve y porque cuando estás en actividad te cuesta disfrutar, hoy si vuelvo será para disfrutar", completó Delpo.