"Hay que cuidar lo logrado hasta ahora. Y anticiparse a un nuevo escenario de circulación de cepas más contagiosas y letales". Con estas premisas, y luego de varios días de análisis y reuniones entre gobernadores y funcionarios de las distintas carteras, el Gobierno nacional anunció ayer la implementación de nuevas restricciones, tendientes a evitar un rebrote y contener la circulación de cepas como la de Manaos en el país.

Mediante una decisión administrativa que se publicó a la medianoche en el Boletín Oficial, el Gobierno resolvió suspender a partir del sábado los vuelos provenientes de Brasil, México y Chile, los tres destinos que generan más preocupación en el actual escenario epidemiológico. Estas suspensiones se suman a la de los vuelos de Gran Bretaña, ya decretada. Además habrá nuevos controles y requerimientos para los argentinos que regresen desde el exterior. 

A partir del sábado, quienes viajen a la Argentina deberán hacerse un testeo antes de abordar el avión, otro al llegar al país, y otro testeo al séptimo día de ingreso. Los tres testeos deberán ser pagados por las y los pasajeros

Quienes resulten positivos deberán realizar otro testeo especial, de secuenciación genómica. En este caso, será un PCR que invidualiza con qué cepa del virus se ha producido el contagio. Junto con sus contactos estrechos, la persona que ha dado positivo deberá cumplir aislamiento "en los lugares que indiquen las autoridades nacionales". "La estadía en los citados lugares de aislamiento será a cargo de la persona que ingrese al país, y deberá efectivizarse de la forma que establezcan las autoridades competentes", indica el texto de la decisión administrativa. 

Ante contagios de cepas cuyo ingreso al país se está intentando evitar especialmente, como la Manaos, el paciente será especialmente aislado, y la evolución del caso seguida de manera más exhaustiva.   

Quienes regresan del exterior con test negativo también están obligados a aislarse diez días, en este caso en su domicilio, contados desde el primer testeo realizado en el país de origen. Las autoridades de cada jusridiscción serán las encargadas de controlar que los pasajeros estén cumpliendo el aislamiento. En caso de incumplimiento, corresponde radicar una denuncia penal por violación a medidas contra epidemias y desobediencia a autoridad pública (de acuerdo a los artículos 205 y 239 del Código Penal).

Además de estas medidas, y como modo de seguimiento epidemiológico en casos de contagios, los viajeros deberán declarar los lugares en donde estuvieron los últimos catorce días previos al reingreso al país

El texto establece que quedan exceptuados "los vuelos hacia la República Argentina, con fecha de ingreso programada dentro de las 48 horas de entrada en vigencia" de la decisión. 

En definitiva, lo que se está pidiendo es evitar en todo lo posible viajar al exterior, sumando una serie de condiciones que hacen dificultoso el ingreso. 

Aunque no hay prohibiciones de por medio, todas estas medidas apuntan claramente a desalentar el turismo y la circulación de personas, en un escenario en el que la temida segunda ola avanza en el mundo y en la región, y en la Argentina se da un preocupante crecimiento de casos, sobre todo en la Ciudad de Buenos Aires, donde ayer se registraron casi 1.400 nuevos contagios (ver aparte).   

Viajes de ingresados al contagio

Los viajes de egresados al exterior, y los contagios masivos que acarreron, también fueron seguidos con preocupación por las autoridades nacionales, y las nuevas medidas los contemplan especialmente, sumando protocolos que deben presentar las agencias y certificaciones para los testeos. 

"La actividad desarrollada por los operadores turísticos relativa a la comercialización de viajes de egresados internacionales requerirá la presentación ante el Ministerio de Turismo y Deportes de una propuesta de protocolo sanitario que contemple los controles que requiera la autoridad sanitaria nacional", establece la resolución. 

Y en relación a los test PCR que, según se comprobó, eran falsificados, se aclara que deben incluir "las certificaciones del centro de testeo del lugar de destino en el exterior, emitidos por la autoridad sanitaria de ese país, quedando suspendidos los servicios ofrecidos hasta tanto se realicen las autorizaciones y validaciones respectivas, se apruebe el correspondiente protocolo sanitario y los destinos estén autorizados para la operación de transporte internacional de pasajeros y pasajeras".

"Todas las agencias de viajes van a tener que generar un registro especial en el Ministerio de Turismo, tienen que adecuarse al protocolo que se les va a indicar. Los test también deberán incluir todas las certificaciones solicitadas", indicó el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, al anunciar ayer estas medidas en una entrevista en el canal C5N.

Continuidades

Cafiero presentó las nuevas restricciones más bien como una continuidad de las medidas anteriores, y como un modo de despertar conciencia en la población y advertir el peligro del nuevo escenario: "Venimos trabajando desde hace tiempo en diferentes medidas restrictivas. Para fines de diciembre planteamos el cierre de fronteras a quienes venían por turismo, sólo quedó la posibilidad de ingreso para argentinos o residentes. A partir de ahí se fueron ampliando las restricciones, todo apunta a evitar que lleguen nuevas cepas", explicó.

"Tratar de controlar la circulación en la nocturnidad dio un buen resultado en enero, en coordinación con todas las jurisdicciones. Hoy la situación es otra. Estamos en un momento en que Argentina está con un número elevado de casos, pero vemos que en la región están con circulación comunitaria y sostenida de nuevas cepas, más contagiosas y letales", advirtió el jefe de Gabinete.

Fronteras calientes

Tal como viene ocurriendo desde el 24 de diciembre, las fronteras permanecerán cerradas al turismo: Desde entonces sólo pueden ingresar al país los argentinos y residentes, o extranjeros por causas excepcionales debidamente acreditadas o permiso de trabajo. Ahora se suman todos estos controles para argentinos que regresen del exterior.

"Vamos a ser mucho más rigurosos en el control de fronteras", advirtió Cafiero. "Necesitamos tener control sobre quienes están ingresando al país, y hacerlo con mucho cuidado", expresó. 

Sumado a estas medidas para el ingreso aéreo, se fortalecerán los controles de las fuerzas de seguridad en los pasos terrestres formales --la mayoría de los cuales están cerrados-- e informales. Desde la cartera de Seguridad indicaron a este diario que la demanda concreta que surgió de la reunión con los gobernadores provino de Misiones, con su porosa frontera de la Hidrovía Paraná-Paraguay. 

El lunes próximo la ministra Sabina Frederic viajará a esa provincia para hacer un sobrevuelo, evaluar la situación de las bases operativas y los posibles reordenamientos. 

¿Por qué Brasil, México y Chile?

Las nuevas medidas restrictivas parten fundamentalmente de la preocupación por bloquear la circulación del virus, con una advertencia que, aunque parezca bastante básica, los funcionarios no dejan de repetir: "El coronavirus entró a la Argentina en un avión".   

Brasil y Chile son países de frontera que hoy tienen una alarmante circulación comunitaria de la cepa de Manaos. Se suma México porque se registró que muchas personas volviero contagiadas de ese país, aunque no haya sido con la cepa Manaos. 

Otros países que registran altas tasas de contagios, como Estados Unidos, no se incluyen en las restricciones porque no se dan ninguna de las dos condiciones: no registran transmisión comunitaria de la cepa de Manaos, y tampoco hubo gran cantidad de contagiados que vengan de allí.