Con el reclamo de “cárcel perpetua y efectiva” para Angel Andrada, el acusado del femicidio de Carolina Ledesma, comienza este 4 de mayo el juicio oral por el asesinato de la joven de 21 años, madre de dos hijos pequeños y embarazada en el momento de ocurrido el hecho. En un comunicado de la Campaña Justicia por Caro Ledesma, se pide al Tribunal Oral 2 de Lomas de Zamora la condena de Andrada “un femicida, otro hijo sano del patriarcado que mató porque tenía el poder de hacerlo, el poder machista y asesino que le otorga esta sociedad”.

Las evidencias que serán llevadas al juicio muestran que el 18 de febrero de 2019, Carolina Ledesma fue asesinada por quien era entonces su ex pareja, Ángel Andrada, en Ingeniero Budge. Fue asesinada de un balazo en el vientre, estando embarazada de tres meses. Tenía 21 años y era madre de dos niñxs pequeñxs. Era una joven de vida sencilla “llena de proyectos y sueños, a la que le gustaba maquillarse y tomar mates con su mamá en el patio de su casa”. A ella le tocó crecer en un barrio vulnerable, muchas veces olvidado por las políticas públicas, “sin tener la posibilidad de acceder a una vivienda digna, a los servicios básicos, a la salud y a la educación”.

En el comunicado se puntualizó que vivía “en un barrio donde las situaciones de violencia machista y los casos de femicidio no se suman a las estadísticas, no son tapa en los diarios, ni nota en los medios masivos de des-comunicación”.

Angel Andrada, de 28 años, llega al juicio con prisión preventiva. El cuerpo de la víctima, con una herida de bala, fue hallado por su madre, en una habitación de la casa en la que vivían. La llevaron de urgencia al Hospital Oscar Alende, donde falleció como consecuencia del disparo que la había herido en el abdomen.

En el comunicado difundido por las amigas y las organizaciones que piden justicia por Carolina, afirman que “cada femicidio nos cala hondo, nos desgarra de forma abrupta, pero no nos paraliza, ya no, no nos lo permitimos, simplemente”.

“Nos falta Carolina y nos desespera profundamente, porque la conocíamos, porque sabemos su historia y caminamos las mismas calles que ella”. Por esa razón, subrayaron que van “a seguir acompañando, abrazando y luchando por una sociedad libre de violencias hacia nosotras y nosotres. Cada vez somos màs y estamos organizades”.