El presidente Lenin Moreno designó a un nuevo ministro de Salud luego de que cientos de ancianos hicieran colas de hasta siete horas para vacunarse contra el coronavirus en Quito. Al reemplazar a Mauro Falconí (foto), el médico Camilo Salinas se convierte en el quinto ministro de Salud que ocupa el cargo desde que empezara la pandemia y el sexto desde la asunción de Moreno. El cambio en la cartera sanitaria ocurre a días de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, y en pleno aumento de casos de covid-19 en Ecuador, que hasta el momento deja al país con 341.619 infectados y 17.115 muertos.

En su cuenta de Twitter, Lenin Moreno aseguró que la prioridad del nuevo ministro "será continuar con la implementación, corregir errores y potenciar el plan de vacunación". Horas antes, los medios de comunicación locales divulgaron imágenes de largas filas de adultos mayores que debieron esperar hasta siete horas para ser inmunizados contra la covid-19 en colegios y sanatorios de Quito. 

El doctor Salinas fue gobernador de la provincia de Los Ríos hasta octubre de 2020, cuando renunció en plena pandemia. El exministro Falconí, quien llevaba apenas 19 días en funciones, llegó en reemplazo de Rodolfo Farfán, que también debió renunciar salpicado por un escándalo de vacunados VIP.

Farfán, por su parte, había asumido el 26 de febrero en lugar de Juan Zevallos, que estuvo un año al frente de la cartera de Salud y fue criticado por el manejo del primer grupo de vacunas contra el coronavirus que llegaron a Ecuador el 20 de enero, además de reconocer que había inoculado a su madre como "ministro, médico e hijo".

Según el plan del gobierno, la vacunación debía empezar por el personal médico. Sin embargo, se supo que académicos, veteranos políticos, periodistas y dirigentes deportivos fueron prioridad para la inmunización. Tras esa revelación, la Fiscalía ecuatoriana inició una investigación por supuesto tráfico de influencias.

Antes que Zevallos ocuparon el ministerio de Salud Catalina Andramuño, que renunció con menos de un año en funciones por falta de presupuesto para afrontar la pandemia, y Verónica Espinosa, separada del cargo en julio de 2019 en medio de críticas porque no se aprobó una canasta de nuevos medicamentos.