Once concejales además de su autora, Romina Arroyo, suscribieron el miércoles pasado un proyecto de ordenanza ingresado durante la última sesión del Concejo Deliberante, por el que se determina la suspensión de la construcción de ciclovías en la Capital, hasta tanto el Ejecutivo Municipal presente un Plan Integral de Movilidad para la instalación de las mismas, que a su vez deberá ser aprobado por el Concejo Deliberante de Salta.

La iniciativa, fue la culminación de un enfático discurso de la concejal Arroyo, que preside el bloque Salta tiene Futuro, que en el tramo de manifestaciones pidió a la intendenta, con inusual vehemencia, que “ pare con las ciclovías”.

Arroyo agitó sus brazos hacia el frente, cruzó reiteradamente sus palmas, en el típico gesto de no va más, al tiempo que decía: "¡no construya más, no queremos más ciclovías en el micro centro!".

Previamente, Arroyo consideró que la prioridad de asfalto para los vecinos, es por donde transita el transporte público y anunció la presentación del proyecto de ordenanza pidiéndole a la intendenta que suspenda la construcción de las ciclovías en la ciudad y “ que los concejales puedan rever la posibilidad de remover las ciclovías existentes”.

Además dijo que “se gasta más en una ciclovía que no usa nadie, que en una calle asfaltada; no estoy en contra de las ciclovías, hay que trabajar sobre las bicisendas existentes", tras lo cual pidió distinguir entre ciclovías en la calle y los circuitos en los espacios públicos, que mucha gente usa.

Manifestó su preocupación por la forma en que se están construyendo, por el abandono que tienen esas obras, especialmente en Belgrano, Alvarado y lo que se va hacer en calle Alvear.

“No importa si aprobamos el PIDUA, que es un programa integral para la ciudad; esto es una improvisación vergonzosa en la vía pública, con bloques de cemento, sin señalización, sin que hayan puesto la cartelería de las empresas que las construyeron, sin sendas peatonales marcadas, se achicaron las calles, sin hablar con SAETA, ni la AMT, ni con el transporte impropio.

“Esta no es la obra que necesita Salta, la prioridad es otra, se nos burlan y ríen en la cara. Las ciclovías no son revolucionarias, por ahí no pasa ni una mosca y ¡lo peor es que el estacionamiento de bicicletas ocupa las esquinas, tapa las rampas y si alguien vio una bicicleta estacionada, manden una foto!", dijo casi a los gritos la autora de la iniciativa.

El proyecto

El artículo primero del proyecto expresa: Incorpórese una cláusula transitoria al Plan Integral de Desarrollo Urbano Ambiental (PIDUAII) con una duración de seis meses, que quedará redactada de la siguiente manera: Suspéndase la construcción de las ciclovías hasta tanto el Departamento Ejecutivo Municipal presente un plan integral para la construcción de las mismas, el cual deberá ser aprobado por el Concejo Deliberante.

El artículo segundo plantea que para evaluar ese plan se creara una comisión técnica de evaluación con al menos 12 representantes de diversos sectores, cuya representación está definida en el artículo sexto.

En tanto el artículo cuarto propone que el Departamento Ejecutivo Municipal no podrá instalar nuevas ciclovías en la ciudad de Salta salvo previa presentación y aprobación de un plan integral de movilidad de ciclovías a la comisión integrada a tal fin.

Además de la autora, firmaron el proyecto los concejales Liliana Monserrat, Francisco Benavidez, Raúl Córdoba, Santiago Alurralde, Francisco Ruarte, Laura García, Florencia Mora, Susana Pontussi, Paula Benavides, Julio Romero y Candela Correa.

El proyecto, que será sometido a comisión no lleva las firmas de José Gauffín y Frida Fonseca, que preside la comisión de Legislación General. Tampoco fue firmado por Ángel Causarano, Rosa Herrera, Jorge Altamirano, José García y Abel Moya, además del presidente del cuerpo, Darío Madile