La Secretaría de Comercio Interior, a través de la Subsecretaría de Acciones para la Defensa de las y los Consumidores, imputó a Nestlé, Agropecuaria Paso Viejo y, nuevamente, a Mondelēz por presuntas infracciones en los etiquetados de los productos que podrían inducir a la confusión de las y los consumidores.

El accionar utilizado por Nestlé y Mondelēz repetiría la conducta identificada en las imputaciones realizadas recientemente: se modifica mínimamente una propiedad y/o el contenido neto de algunos productos, para luego incrementar sustancialmente los precios

Este tipo de comportamiento podría representar un incumplimiento de los principios básicos de la Ley de Defensa del Consumidor. Por un lado, no se estarían informando de manera cierta, clara, y detallada las diferencias existentes entre bienes de igual categoría, marca y sabor. Por el otro, estas prácticas pueden confundir sobre la naturaleza del producto y sus principales características, motivando al error, y promoviendo la adquisición de un bien no deseado.

Respecto a Nestlé, Comercio Interior observó que la empresa ofrece dos productos de Nescafé Dolca Torrado que tienen igual tamaño, contenido y variedad, además de idéntica información nutricional, sugerencias de preparación, ingredientes, contenido neto, e incluso recomendaciones para la reutilización del frasco de vidrio. La diferencia más relevante entre ambos productos, es que uno de los envases contiene la leyenda “Estamos re-creando nuestro envase, dale nueva vida al frasco”, en color verde. La diferencia de precio entre estos dos envases es del 40 por ciento.

Por su parte, Mondelēz muestra una práctica similar a la ya referida sobre las galletitas Pepitos. En este caso, ofrece las reconocidas galletitas Oreo en dos presentaciones idénticas en cuanto a su envoltorio, color, diseño y frases, pero con un gramo de diferencia (117 gramos y 118 gramos) entre ambas. No obstante, la variación de precio es de más del 50 por ciento.

Por último, Agropecuaria Paso Viejo fue imputada por la comercialización del producto Viejo Olivar que se presenta como “Aceite de Oliva Extra Virgen”, cuando en realidad en la letra chica de los ingredientes indica que contiene aceite de girasol y de oliva. Asimismo, en la denominación del producto figura la descripción “Aceite comestible mezcla”. De este modo, la empresa engañaría respecto de la verdadera calidad y naturaleza del producto que se vende en los comercios.

Si bien todavía se encuentra en instancia de imputación, en el caso de que efectivamente se acrediten esas conductas, las multas para cada una de las empresas puede ascender a un máximo de 550.000.000 de pesos.