En mayo de 2019 lanzamos la revista digital Guay desde la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata. El desafío, en primer lugar, había pasado por encontrar y pulir los carriles particulares por los que iba a moverse este proyecto. Aun cuando era inimaginable la situación de pandemia, y con ella la saturación de contenidos online, ya en ese entonces no eran pocas las publicaciones ligadas a universidades, a veces más académicas, a veces más periodísticas; unas ligadas a los tiempos largos de la investigación, otras a la velocidad de la noticias. Nos interesó imaginar, pues era lo que nos gustaba leer, una revista que eludiera esas dos figuras mayores, incluso cuando cada tanto las rozara.

Como toda Facultad, la nuestra forma investigadores y profesores, por lo tanto reúne todo un saber específico y propio de esa dos lenguas que tienen más de un punto de intersección. Pero a la base, quizás como pasión primera que conduce una vocación y la vuelve un oficio, hay un gusto por la lectura, por una lectura incluso previa a cualquier especialización. Se trata, lo sabemos bien, de una inclinación obstinada, que busca las fisuras para seguir desarrollándose, más allá de que los compromisos aprieten y que el tiempo se encoja. Guay invita a leer y volver a leer recuperando ese vínculo primero con la lectura, deshace momentáneamente los caminos más trasegados y traza un paréntesis.

Una novela, un libro de historia o de poesías, una película, una muestra de fotografías, una serie. En el centro –o en la mesa– Guay no pone conceptos o procesos, discusiones más o menos viejas aunque siempre pertinentes, sino piezas, obras. Comenta, reseña, hace recensiones sin más pretensión que destacar el relieve de cada una de ellas y, de ese modo, entusiasmar a otrxs en la lectura, contagiarla en lo posible. Nos gustaría que Guay fuera una reacción contra lo que aturde.

En nuestra revista escriben desde doctores en Geografía o Letras hasta estudiantes que están próximos a recibirse de alguna de las carreras de la Facultad de Humanidades. Profesores de Ciencia Política de la Universidad Nacional de Villa María, provincia de Córdoba, maestras de la ciudad de Buenos Aires, activistas, psicoanalistas y militantes. Nos gusta mucho y apostamos por un elenco así de variado, que no se estabilice, y en el que las diferencias de trayectoria y de titulación quedan de lado, se suspendan al menos por un momento, gracias una vez más a la centralidad que adquiere la lectura atenta de una obra. En este sentido, de lo que más satisfecho nos deja –y nos seguirá dejando– de nuestra tarea es que nuevas generaciones de investigadores y profesores de la nuestra Facultad hayan hecho suya a Guay, abriendo la posibilidad de una conversación entre generaciones que circule a través de lecturas.

Esta experiencia editorial, que sólo podría desarrollarse desde una universidad pública, no sería la misma sin la estética que la abraza y a la vez la motoriza. Nos interesa sostener una página pulcra, que no distraiga ya más de lo que cotidianamente nos distraemos, así como producir imágenes que acompañen a los comentarios de las obras, imágenes que recuerden que el pensamiento y la universidad pública están del lado de lo que inquieta, de lo que no le teme a los colores que en una esas nos arrancan de la somnolencia.

*Profesora titular del Taller de Diseño en Comunicación Visual 1C, Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Editora de la revista digital Guay.

** Profesor de Historia, docente en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (FaHCE ) de la UNLP. Editor de Guay.

***Profesor adjunto en la carrera de Historia (FaHCE-UNLP). Coordinador de Guay.