Escribir es una forma de conciliar sus raíces francesas y senegalesas. David Diop se convirtió en el primer escritor francés en ganar el Premio Booker Internacional por At night All Blood Is Black, su primera novela traducida al inglés por Anna Moschovakis, publicada en español como Hermanos de alma (2020) por Anagrama, la desgarradora historia de un soldado senegalés en las trincheras de la Primera Guerra Mundial, cuyo descenso a la locura tras la muerte de un amigo de la infancia en el frente comienza a manifestarse con extrema brutalidad contra los soldados alemanes. Entre los finalistas estaban Mariana Enriquez con los cuentos de Los peligros de fumar en la cama (The Dangers of Smoking in Bed), traducido por la estadounidense Megan Mc Dowell; y el chileno Benjamín Labatut con Un verdor terrible (Anagrama), traducida al inglés por Adrian Nathan West. Diop y su traductora se repartirán en partes iguales el premio de 50.000 libras esterlinas, unos setenta mil dólares.

Aunque Diop nació en París en 1966, de madre francesa y padre senegalés, pasó su infancia en Dakar, la capital de Senegal, antes de regresar a su país natal para estudiar y convertirse en profesor de Literatura del siglo XVIII en la Universidad de Pau, en el suroeste de Francia. Para escribir la novela se inspiró en el silencio de su bisabuelo senegalés sobre su tiempo en esa guerra. “Nunca dijo nada a su esposa, ni a mi madre, sobre su experiencia. Por eso siempre me interesaron mucho todas las historias y relatos que daban acceso a una forma de intimidad con esa guerra en particular”, comentó el escritor francés recientemente a la BBC. La presidenta del jurado del Premio Booker, la historiadora Lucy Hughes-Hallett, calificó a Hermanos de alma como “una novela extraordinaria”. “El libro es aterrador; al leerlo sientes que te hipnotizan", reconoció. "Tus emociones están todas revueltas, tu mente se está abriendo a nuevos pensamientos. Es una pieza narrativa extraordinaria, muy poderosa, muy convincente. El protagonista está acusado de brujería y todos nosotros sentimos que este libro de alguna manera nos había embrujado”.

Hughes-Hallet describió la novela de Diop como “una historia sobre la guerra, pero también sobre el amor, la camaradería de esos jóvenes que luchan juntos y las relaciones intensas que forman las personas que corren el riesgo de morir juntas”. La presidenta del jurado agregó que también es una historia sobre el lenguaje porque el protagonista “no habla mucho francés, por lo que es una historia escrita en francés, que leemos en inglés, sobre un hombre que piensa en wólof” (lengua hablada en Senegal y Gambia). “Diop ha hecho algo muy inteligente al crear una especie de lenguaje de encantamiento que de alguna manera transmite ese sentido de lo que es pensar fuera de su propio idioma. Este libro hace lo que hace la mejor poesía al entrar en la conciencia del lector a un nivel que pasa por alto la racionalidad y trasciende el tema”, subrayó Hughes-Hallet.

Desde que la novela se publicó en Francia fue preseleccionada para diez premios literarios y ganó el Prix Goncourt des Lycéens y el Globe du Cristal du Meilleur Roman 2019. Hermanos de alma narra la historia de Alfa Ndiaye, un soldado senegalés que combate junto al ejército francés durante la Primera Guerra Mundial. Su amigo Mademba Diop es herido de gravedad y le pide que lo mate para evitar el sufrimiento inútil. Alfa, que no puede cumplir con este deseo, quiere vengar la muerte de su amigo. Entonces comienza a asesinar a soldados enemigos del mismo modo en que murió Mademba. Noche tras noche repite un macabro ritual: le corta la mano a un soldado alemán y se la lleva de trofeo. Pronto se corre el rumor de que Alfa es un hechicero, un devorador de almas.

“Hace varios años leí unas cartas que había recopilado el historiador Jean Pierre Guéno, verdaderos testimonios absolutamente conmovedores escritos por jóvenes, heridos abandonados en tierra de nadie. En ellas se dirigen a sus familiares anunciándoles que están a salvo pero cuando la familia recibe sus cartas, muy emotivas, los soldados ya están muertos", dijo Diop en una entrevista con el diario español El Cultural. "Cada novela tiene su color, su estilo. Para Hermanos de alma, el estilo que buscaba debía permitirme traducir la emoción de este personaje, artillero senegalés. Es decir, bajo un estilo repetitivo, como si fuera una letanía. Por eso estuve años reflexionando hasta que conseguí el tono propio de esta obra”.

Diop es especialista en literatura francesa del siglo XVIII y en las representaciones europeas de África en los siglos XVII y XVIII. “Yo pienso que la literatura, por lo menos en mi novela, es una manera de devolver la palabra a los vencidos, a los que no hacen la historia”, explicó el escritor francés. “La historia está escrita por los vencedores. No se sabe qué pensaban los artilleros senegaleses sobre Francia, sobre la lucha, sobre la Primera Guerra Mundial. Llegaban del campo y si conseguían volver a sus casas vivos, contaban a sus familias, ya de vuelta en Senegal, algo que no nos ha llegado. Esa es la labor de la literatura. A mí me interesa intentar imaginar y eso solo nos lo permite la literatura, el conocer el estado de espíritu, las sensaciones, los sentimientos de los personajes. La literatura puede emocionar, cuando lo que hace la historia es explicar”.