La cápsula Dragon, perteneciente a la compañía SpaceX, se acopló con éxito este sábado a la Estación Espacial Internacional (EEI), luego de despegar este jueves desde el Centro Espacial Kennedy, situado en Cabo Cañaveral, Florida, Estados Unidos.

La NASA informó que la cápsula con más de 3.300 kilos de carga se adjuntó de forma autónoma a las 5.09 (hora local) al módulo Harmony de la EEI, que en ese momento se ubicaba sobre el sur del Océano Pacífico. 

La operación fue supervisada por los astronautas Shane Kimbrough y Megan McArthur, ambos de la agencia espacial estadounidense.

De esta manera, la EEI alcanzó un total de cinco artefactos espaciales acoplados en su estructura: la nave de carga Cygnus-15, la misión tripulada Crew-2, y las rusas Progress 77 y Soyuz MS-18.

NASA

En la parte trasera de la cápsula Dragon viajaron dos grandes paneles solares desplegables, el primer par de un grupo de seis que la NASA tiene planeado enviar a la estación espacial con el objetivo de aumentar el suministro de energía hasta en un 30%.

Este primer par de paneles denominados ROSA, cuya tecnología ya fue probada en la EEI en 2017, serán colocados en otras otras misiones espaciales los próximos 16 y 20 de junio.

Vida en el espacio

Como parte del material científico y de investigación, la cápsula también transportó una carga de distintas formas de vida: sepiólidos y tardígrados. Esta última especie es conocida como “oso de agua” y suele alcanzar apenas 1,5 milímetros en su edad adulta.

Con los sepiólidos se planea estudiar el impacto de la microgravedad en la simbiosis de microbios, mientras que con los tardígrados, que son capaces de sobrevivir a los entornos más duros, el efecto de la microgravedad y la radiación.

La cápsula Dragon, que se quedará en la EEI durante alrededor de un mes antes de volver al Atlántico con material de investigación, despegó este jueves en la cápsula de un cohete Falcon 9.

Tal y como estaba previsto, el propulsor del Falcon 9 descendió en poco tiempo en una plataforma marítima colocada en el Atlántico para que luego pueda volver a ser reutilizado.

Se trató del primer viaje para esta parte del cohete, el cual volverá a emprender vuelo este año en una tercera misión tripulada a la EEI, la Crew-3, que estará a cargo de la NASA y SpaceX.

La misión de abastecimiento al laboratorio orbital número 22 forma parte de la asociación público-privada de la NASA con la compañía fundada en 2002 por Elon Musk, quien también es fundador del fabricante de automóviles eléctricos Tesla.