El Gobierno Nacional está muy preocupado por el avance de la variante Delta de covid en el mundo y por ese motivo comenzó a regir en los tres "corredores seguros" por los que pueden entrar personas a nuestro país --Ezeiza, San Fernando y Buquebús-- una restricción del ingreso que tiene como límite máximo la entrada de 600 personas diarias. Las fronteras terrestres en tanto, continúan cerradas para el ingreso, salvo que se trate de actividades de comercio internacional, y el acceso para extranjeros que no tengan que cumplir en nuestro país una tarea esencial, sigue prohibido. "Aunque sea absolutamente antipático anunciar este tipo de medidas, se trata de una necesidad sanitaria", aseguró la directora de Migraciones, Florencia Carignano. En el mundo, en tanto, son 101 los países que tienen sus fronteras cerradas --solo pueden entrar sus ciudadanos o residentes-- y 113 los que tienen sus fronteras abiertas, pero con limitaciones --como contar con la vacunación completa, y/o con resultado negativo de una prueba PCR o antígenos, y/o que se sometan a una cuarentena a su llegada--, según los números que manejan en Casa Rosada.

La decisión del Gobierno de bajar el número de personas diarias que pueden ingresar a la Argentina de 2000 a 600 se tomó el sábado, pero comenzó a regir hoy. En ese sentido, Carignano aseguró en declaraciones radiales que "los que fueron de vacaciones van a tener que volver lamentablemente un poquito más tarde, pero es preferible a que tengamos que suspender las clases por un brote". Según indicó la titular de Migraciones, la intención del Gobierno es que todos los argentinos que se encuentran en el exterior por distintos motivos puedan volver, aunque no sea "en el momento que ellos deseaban", y remarcó que "nadie sale obligado en pandemia". 

Desde el Ministerio del Interior recordaron que, al salir de la Argentina, todos los viajeros firman obligatoriamente una declaración jurada en la que se explicita que "la salida del país implicará la aceptación y asunción de las consecuencias sanitarias, legales y económicas derivadas de la misma y del eventual reingreso a la Argentina", además de aceptar realizar una cuarentena obligatoria al regreso. "Cuando uno decide salir, hay riesgos que evaluar: si me enfermo afuera ¿qué pasa?, ¿tendré la capacidad para pagar una clínica privada en Estados Unidos? No está prohibida la salida, pero no está recomendada y en este caso tuvimos que tomar esta decisión", detalló la directora de migraciones al respecto. 

"Lo que nos lleva a tomar estas decisiones es que la epidemiología nos dice que India es el primer lugar donde circula la variante, el segundo Gran Bretaña y el tercero Estados Unidos y nosotros con Europa y Estados Unidos tenemos la mayor cantidad de vuelos", expresó Carignano. Los vuelos provenientes de GB, Irlanda del Norte, Chile, Brasil, India, Turquía y todos los países africanos, en tanto, continúan suspendidos. Las empresas aéreas, que se agrupan en la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) pidieron de manera "urgente" una reunión con el Gobierno para conocer cómo se repartirán los cupos disponibles. Si bien la medida regirá hasta el 9 de julio, es probable que se extienda para darle tiempo al proceso de vacunación, en un contexto en el que el 35 por ciento de la población ya fue vacunada con al menos una dosis.

Desde la cartera del Interior aseguraron a este diario que las fronteras terrestres, si bien están abiertas para el egreso y uno puede salir con su vehículo personal sin ningún problema cuando así lo desee, la situación no es la misma para ingresar porque directamente el ingreso está cerrado. "Hoy solo existen tres vías de frontera abiertas para el regreso de argentinos: Ezeiza, San Fernando y el puerto de Buquebús. Esas nunca cerraron", puntualizaron. Los turistas, en tanto, no pueden entrar por más que tengan el esquema de vacunación completo o presenten test negativos. Sí lo pueden hacer los extranjeros que, como establece el DNU emitido en diciembre, necesiten estar en Argentina por actividades laborales, comerciales, intercambios culturales, actividades artísticas, deportivas, entre otras.  

"Cerrar la frontera implica que no entra ni sale nadie y eso no sucede porque los argentinos pueden salir cuando y con el motivo que quieran", puntualizan desde el Gobierno. Sin embargo, el ingreso tiene requisitos como en la mayoría de los países del mundo. 

Las fronteras en otros países

Fueron varios los países que en los últimos días endurecieron los requisitos para los ingresos debido a la propagación de la variable Delta. A partir de este martes Alemania restringirá las llegadas de Portugal y Rusia; en Australia, Sydney cerró sus fronteras; China mantiene la suspensión de entrada de ciudadanos extranjeros sin permiso de residencia al igual que Uruguay; en Japón se recomienda no realizar viajes innecesarios y se prohíbe la entrada a no residentes; Israel decidió posponer el ingreso de turistas vacunados hasta el primero de agosto, cuando iba a ser hasta el 1 de julio; Chile mantendrá cerradas las fronteras hasta fin de mes; Nueva Zelanda suspendió desde el sábado por tres días la "burbuja aérea" y Bélgica prohíbe la entrada de viajeros que no sean de la UE.