El gobierno catalán decidió este martes dar marcha atrás y cerrar a partir de este fin de semana los locales nocturnos que no estén al aire libre para frenar la propagación “exponencial” del coronavirus en esta región del noreste de España. La medida obedece a que se registra un fuerte aumento de contagios especialmente entre jóvenes.

“Hay que cerrar el ocio nocturno que no se haga en espacios abiertos y también imponer restricciones a los eventos al aire libre que reúnen a mucha gente”, anunció este martes la vocera del Gobierno de Cataluña, Patricia Plaja, al tiempo que calificó la situación epidemiológica en Cataluña de “extremadamente complicada”.

A partir de este fin de semana, los locales nocturnos de esta región de fuerte actividad turística no podrán usar sus espacios cerrados. Además, quienes participen en eventos al aire libre que reúnan a más de 500 personas deberán realizarse un test de antígenos, presentar una prueba PCR negativa con una vigencia de más de 12 horas o una constancia de que tienen la vacunación completa.

La resolución en la que se encuentra trabajando el gobierno catalán -y que sólo le falta definir detalles, según Plaja- también establecerá el cierre de las actividades nocturnas a partir de las 3 de la madrugada hora local.

El aumento de los contagios en Cataluña, que está afectando especialmente a los más jóvenes que todavía no se vacunaron, se disparó en las semanas posteriores a la celebración de la popular verbena de San Juan y la reapertura de la actividad nocturna en Cataluña días antes.

“No es que la pandemia no haya acabado, es que se está mostrando con una virulencia que todavía no conocíamos. El ritmo de transmisión es muy alto”, advirtió Patricia Plaja tras una reunión del gobierno catalán realizada un día después de que esta región con 7,8 millones de habitantes registrara más de 6.000 contagios en un solo día.

Debido a esto, la vocera señaló que se está evaluando volver al uso obligatorio de barbijos en exteriores, que Madrid dejó de imponer el 26 de junio.

“Con los datos que conocemos hoy creemos que la mascarilla debe de volver a ser un elemento obligatorio en Cataluña, pero solo el gobierno español puede modificar su uso”, afirmó Plaja.

“Los datos no son nada buenos” aseguró este lunes a la noche Fernando Simón, epidemiólogo jefe del ministerio de Sanidad, quien explicó que “este dato es muy variable en los distintos grupos de edad”.

Ante esta situación, varias regiones de España están analizando si aumentan las restricciones a pesar del buen ritmo de vacunación que tiene el país: un 40,3% de los 47 millones de españoles ya está totalmente vacunado.