El torneo Apertura femenino ya tiene su último finalista: San Lorenzo, que venció a la UAI Urquiza este domingo por 1-0, tras un duro y parejo partido que se definió en los últimos diez minutos para meter a las jugadoras azulgranas en el partido definitivo, donde las espera Boca, verdugo de River por la otra semifinal.

Platense alojó el escenario para definir al rival del equipo xeneize en un encuentro que dejó en claro el buen nivel de ambos conjuntos. En un juego de detalles, el elenco conducido por Nicolás Basualdo sacó la diferencia a fuerza de dos jugadoras, las figuras de la única victoria que entregó el torneo en esta instancia previa a la final, luego del empate por 2-2 en el superclásico que clasificó a Boca en los penales.

Eliana Medina fue la primera en ponerse el traje de superheroína, para quebrar un partido cerrado con el temple y la calidad que la caracteriza. Fue a los 39 minutos del segundo tiempo, cuando bajaron a su compañera Cecilia López en el área por medio de una falta inobjetable. La capitana se hizo presente enseguida en la escena y se adueñó de la pelota ni bien la árbitra cobró el penal. No le quemaba la bola entre las manos, a la experimentada futbolista azulgrana. Y eso se notó, también, dos minutos después, cuando entregó una ejecución notable, fuerte al medio y arriba, para poner el 1-0 y hacer estallar la emoción.

La UAI, otro de los habituales animadores de la máxima categoría del fútbol femenino, salió a la carga para intentar empatar el marcador. Y allí fue cuando, como es también figurita repetida en el Ciclón, Alicia Bobadilla volvió a demostrar ese alto nivel que la convierte en una de las mejores arqueras del Apertura. La paraguaya, dueña del arco de su Selección, atajó -a los 44 minutos del segundo tiempo- un violento remate de Marina Delgado, con los reflejos de las grandes, porque el ataque de la UAI había conquistado el área chica y el potente disparo salió delante de sus ojos. Su actuación, en esa maniobra de salvataje, valió tanto como un gol.

Por eso, tras el pitazo final, el abrazo entre la 10 y la que lleva los guantes puestos fue una buena metáfora de lo ocurrido este domingo en la cancha de Platense, en el mediodía en el que San Lorenzo edificó su victoria en el instante en el que (Medina) tuvo su oportunidad y, ya cuando (Bobadilla) la tuvo entre las manos, no la dejó escapar. Ahora, en la final -que aún no tiene fecha confirmada- en la que Las Santitas buscarán su primer título en la era semiprofesional, espera el campeón: Boca.