La Fórmula 1, la Federación Internacional del Automovilismo (FIA) y las escudería Mercedes y Red Bull condenaron este lunes los ataques racistas que sufrió el piloto Lewis Hamilton por su colisión en la primera vuelta del GP de Gran Bretaña con su principal competidor, el neerlandés Max Verstappen, a quien sacó de la carrera.

"Durante el Gran Premio de Gran Bretaña de ayer, Lewis Hamilton fue objeto de múltiples ejemplos de abuso racista en las redes sociales tras una colisión en carrera. La F1, la FIA y el equipo de Fórmula 1 Mercedes condena este comportamiento. Esta gente no tiene lugar en nuestro deporte", cuestiona el comunicado.

"La Fórmula 1, la FIA, los pilotos y los equipos trabajan para construir un deporte más diverso e inclusivo y estos ejemplos de abuso online inaceptables deben subrayarse y eliminarse", abunda el texto suscrito por las tres entidades.

El accidente de este domingo entre Hamilton y Verstappen en la largada del GP en Silverstone, que finalmente ganó el británico, polarizó a los fanáticos y provocó todo tipo de reacciones al respecto.

Desde el equipo Red Bull, para el que compite Verstappen, también condenaron los ataques racistas hacia Hamilton. "Aunque somos grandes rivales en pista, todos estamos unidos contra el racismo. Estamos disgustados y tristes por el abuso racista que Hamilton tuvo que soportar ayer en redes sociales tras la colisión con Verstappen", afirmó la escudería austríaca.



La maniobra del séptuple campeón mundial generó polémica e incluso fue criticada por el propio piloto neerlandés, quien tras el impacto del accidente fue derivado a un hospital para control físico. Verstappen se molestó por el "comportamiento irrespetuoso y antideportivo" que significó el festejo de Hamilton tras su victoria en Silverstone.

“Me alegro de estar bien. Muy decepcionado por haber sido eliminado así”, comenzó el piloto de Red Bull, que debió hacerse estudios tras el fuerte impacto con su auto. “La sanción impuesta no nos ayuda en nada y no hace justicia a la peligrosa maniobra que hizo Lewis en la pista. Ver las celebraciones después de la carrera estando aún en el hospital es una falta de respeto y un comportamiento antideportivo, pero seguimos adelante”, publicó el líder del torneo en sus redes sociales.


También fue muy duro el director deportivo de Red Bull, Christian Horner, que cuestionó el accionar del campeón del mundo. "Ojalá Lewis esté feliz consigo mismo. Puso a un oponente en el hospital. Hamilton tiene suficiente experiencia para saber que eso no se hace, le metió una rueda en una de las curvas más rápidas que hay", expresó el ingeniero de Red Bull, que luego también condenó los ataques racistas hacia el piloto inglés, al asegurar que "la rivalidad es intensa pero sólo en la pista" y que en su equipo hay "tolerancia cero" contra ese tipo de ataques racistas.


El volante de Red Bull partió desde la "pole position" pero perdió el control del auto en un intento de sobrepaso por parte de Hamilton, cuyo Mercedes lo impactó en la rueda trasera derecha al llegar a una de las curvas más veloces del trazado. Después de estrellarse contra la contención, salió del monoplaza por sus propios medios y abandonó la pista en ambulancia con la carrera detenida por el accidente.

Los comisarios deportivos analizaron el desempeño del británico y le aplicaron una sanción de 10 segundos, que de todas formas no le impidió lograr su victoria número 99 en la historia de la F1.