Por unanimidad, los jueces subrogantes de la Cámara de Apelaciones, Patricia Olmi, Rolando Palacios y Marcelo Soria, decidieron enviar a juicio sólo a dos de los trece imputados por la muerte de 12 personas sucedida el 23 de enero de 2014 en la localidad de El Rodeo, Catamarca. La querella se mostró disconforme con el fallo, cargó contra las actuaciones del fiscal Jonathan Felsztina “por traicionar a las familias de las víctimas” y contra la decisión del Tribunal del alzada. Los fundamentos se conocerán el 6 de agosto.

La audiencia de apelaciones, quinta en el marco de la misma causa, se concretó el 8 de julio pasado. La apelación había sido interpuesta por los abogados de las víctimas y por el propio fiscal que instruye la causa, Felsztina contra la decisión del ex juez de Garantías, Porfirio Acuña, quien había ordenando sobreseer a los 13 acusados. En aquel momento, el representante del Ministerio Público Fiscal mantuvo la acusación sólo contra Félix Casas Doering (quien era intendente de El Rodeo al momento de la tragedia) y Alfredo Saavedra (exdirector de Defensa Civil).

Los abogados de las víctimas, por su parte, pidieron que se incluya también a los otros 11 responsables de la tragedia: Eduardo Brizuela del Moral (exgobernador de la provincia), Néstor Rosales (exadministrador de Vialidad Provincial), Jorge Solá Jais (exadministrador de VP), Luis Alejandro Dal Bon, Elías del Señor Seleme, Hugo César Zurita, Miguel A. Villafáñez, José Argañaraz, Daniel Acuña, Luis Alfredo Pinetta y Juan Negui (secretario de Recursos Hídricos).

Los magistrados, luego de deliberar 22 días, coincidieron con el argumento del fiscal y enviaron a juicio sólo al Intendente de la localidad y al exdirector de Defensa Civil.

Tras conocer la decisión, el abogado José Gigena señaló: “liberaron once de los responsables y estamos totalmente disconformes con el fallo. Es una burla a la Justicia y a las víctimas”, dijo y cargó también  contra el fiscal instructor a quien calificó como “el mejor defensor de los imputados”.

“La Justicia catamarqueña no puede tener este tipo de fiscales, ellos tienen que velar por las víctimas y no buscar todos los elementos para exonerar a los imputados, como hizo él. No puede ser esa persona fiscal cuando es defensor. Se les hizo fácil a los defensores de los imputados porque han tenido nada más que copiar lo que el fiscal había dicho. Traicionó a las víctimas. Sabemos que éste funcionario hoy pretende ser vocal de cámara. Sería una verdadera ignominia y una mancha para la justicia catamarqueña que este hombre sea nombrado juez”, manifestó Gigena.

Con respecto al fallo de los jueces, dijo que “nunca entendieron que hicieron mal el puente. Nunca analizaron cómo el propio gobierno se declaró culpable de haber hecho mal esa obra. En estos años lo demolieron y construyeron otro obedeciendo las instrucciones de la misma comisión que ellos habían nombrado, una comisión para analizar las causas del desastre”, aseguró.

Gigena contó que las familias estuvieron conformes con las actuaciones e investigación que llevó adelante el exfiscal Roberto Mazzuco, que fue quien estuvo en el lugar al momento de suceder los hechos y quien imputó a los 13 funcionarios y aportó la mayoría de las pruebas a la causa. “Ese fiscal se jugó, pero cuando él no estuvo más actuaron Alejandro Gober y Felsztina, quienes sólo buscaron pruebas para exonerar a los responsables”, dijo y agregó que esperan conocer los fundamentos para

El caso

Las pericias determinaron que los puentes de la villa de El Rodeo, ubicada en departamento Ambato, conocidos como el puente de El Mástil y el puente de Villafañez, fueron construidos sobre el cauce del río, por eso la noche del 23 de enero actuaron como dique de contención y provocaron que el barro, las piedras y el agua avancen por el pueblo. En tanto, también se supo que el balneario estaba mal emplazado y que los sistemas de alerta temprana no funcionaron, impidiendo que la gente fuera evacuada.

El alud dejó 11 víctimas fatales: las hermanas Agostina (5) y Dahiana Ahumada (7); María Luisa Castiglione (52) y Dora González de Castiglione (78), María Zulma Mendibe (39), su hija Candelaria Díaz Mendibe (5), y Romina Julieta Silva de Ahumada (25), Adrián Libio Álvarez (54), su esposa Graciela Contreras (51) y sus hijos Emiliano (21) y Darío Álvarez (13), y la desaparición de la joven santiagueña Ana Carolina Sal Castiglione.

La violencia del agua, el barro y las piedras de más de tres metros de diámetro, segó la vida de familias enteras.