Beauchef es una calle de Buenos Aires que atraviesa Caballito y Parque Chacabuco. Recuerda a un militar francés que en la Guerras Napoleónicas cayó prisionero de los españoles y escapó a Estados Unidos, desde donde llegó a Chile para pelear en las guerras de Independencia. Desde hace poco, ese nombre que, como cualquier taxista sabe, acá se pronuncia como se escribe, es también el de una obra sinfónica de Exequiel Mantega. Hoy viernes a las 21, en el canal de YouTube del compositor, pianista y director, se podrá escuchar el estreno vía streaming de Beauchef, la obra escrita durante la pandemia y grabada en sucesivas capas por la Orquesta Sin Fin entre noviembre del año pasado y marzo 2021.

Articulada en cuatro movimientos, que significativamente el compositor llama “fases”, Beauchef es uno de los tantos relatos posibles de este tiempo. A partir de una estructura musical consistente, sostenida por una sólida trama orquestal, las fases van delineando una narrativa sonora por la que se sutilmente se filtran gestos del tango, el folklore y otros expedientes que llegan desde distintas direcciones. “El diseño narrativo es importante en esta obra. Trabajé sobre la idea de guión sonoro, articulado en escenas, con la dinámica de los personajes, los distintos climas y puntos de giro en la historia”, cuenta Mantega.

“Construcción” se llama la primera fase y alude al compositor yendo del corralón a la ferretería, de la casa de sanitarios a la pinturería, para satisfacer los pedidos de quienes trabajaban en la que sería su nueva casa. “Vivíamos con mi familia entre una casa que no se podía terminar desarmar y otra que no se podía terminar de construir. La música, en los tiempos robados a ese trajín, fue el gran cable a tierra. Cuando por fin nos mudamos, llegó la pandemia, el aislamiento. Y otra vez la música fue la salvación”, recuerda el compositor.

“Distancia”, “Aislamiento” y “Consecuencia”, son las tres fases que completan Beauchef . “Al principio iba asentando algunas ideas en un cuadernito, pero sin un horizonte específico. Recién cuando estaba trabajando en la tercera fase me di cuenta de que había un contexto más claro y ya en la cuarta fase trabajé pensando en una obra para orquesta”, cuenta Mantega. Director y creador de la Orquesta Sin Fin, con la que entre otras cosas impulsó el ciclo “Estaciones sinfónicas” en el CCK en 2017 y 2018, y secundó al pianista italiano Stefano Bollani en Chakrcanta –un disco con registros en vivo tomados en Buenos Aires en 2018 y 2019 y editado recientemente en Europa–, Mantega ha desarrollado una destacada actividad en las fronteras de los géneros.

Comenzó a escribir esta obra sinfónica en épocas en las que no se sabía cuándo podría volver a reunir la orquesta ni volver a cualquier forma de normalidad. “Fue una necesidad ante la incertidumbre. Por eso cuando a fines de noviembre se dio una cierta apertura en la pandemia, enseguida convocamos a los músicos y empezamos a grabar”, explica Mantega. “Grabamos por partes, por capas, y esa fue también una experiencia nueva. Al principio pensaba que de esa manera no podía funcionar para un formato orquestal y sin embargo resultó. Pudo más el entusiasmo de volver a juntarse. Al final de cuentas todo pasaba por ahí: volver a juntarse”.