Este lunes Uruguay comenzó a aplicar una tercera dosis de refuerzo de la vacuna de Pfizer a quienes fueron inoculados con dos dosis de Coronavac, que tiene una efectividad inferior a los otros fármacos contra el coronavirus. A pesar de que no hay estudios sobre la combinación, expertos locales sostienen que la medida es segura y necesaria para prevenir el avance de la variante Delta.
Según datos del Ministerio de Salud Pública (MSP), 439.696 personas -alrededor de un tercio de los 3,5 millones de habitantes de Uruguay- ya se anotaron para inocularse con la vacuna estadounidense tras haber recibido dos inyecciones del inmunizante del laboratorio chino Sinovac.
El país vecino ya vacunó al 73 por ciento de su población -mayor a 12 años- con al menos una dosis, mientras que el 67 por ciento tiene el esquema completo. Sin embargo, del total de vacunados un 65 por ciento recibió Coronavac, que tiene una efectividad del 51 por ciento contra la covid sintomática, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El organismo internacional también solicitó que los gobiernos no comenzaran a dar terceras dosis hasta que los países más pobres y que, en consecuencia, están más retrasados con las inmunizaciones no alcancen al menos a vacunar al 10 por ciento de sus poblaciones.
Otros países también revorzaron a los vacunados con Sinovac
Uruguay es el tercer país de América Latina en aplicar un refuerzo con una dosis de ARN mensajero (Pfizer) a quienes recibieron la vacuna de virus inactivado de Sinovac, después de Chile y República Dominicana. A nivel mundial, la inoculación de una tercera dosis ya la llevan adelante países como Alemania, Israel (que vacunó con Pfizer y da un refuerzo del mismo preparado), Francia, el Reino Unido y Rusia.
"La mezcla de plataformas robustece la inmunidad. Históricamente ha sido así", argumentó el virólogo uruguayo Santiago Mirazo a AFP. "Es claro desde el punto de vista teórico y experimental a lo largo de la historia de la inmunología", agregó.
Para Mirazo, es importante la aplicación de un refuerzo porque se comprobó que los anticuerpos producidos por la Coronavac se reducen con el paso de los meses.
Según el virólogo, “los estudios que se han hecho sobre combinación de vacunas han mostrado muy leve aumento de efectos secundarios". De acuerdo a un estudio del MSP, en más de cuatro millones de dosis administradas hasta el 15 de julio, los porcentajes de Efectos Adversos Supuestamente Atribuibles a la Inmunización fueron de 0,02 por ciento para Coronavac y 0,06 por ciento para Pfizer.
Los efectos más frecuentes fueron: dolor en el sitio de la inyección, dolor de cabeza, dolores musculares, malestar general, diarrea, temblores, cefalea, decaimiento y espasmo-bronquial.
Para los efectos graves, en su mayoría trombosis venosa, la proporción fue de dos por millón de dosis.
"La medida es razonable, acertada, oportuna y basada en evidencia -insistió Mirazo-. Es una decisión de salud pública".
En las últimas semanas, Uruguay ha visto caer los números de contagios -este domingo el MPS detectó solo 90 nuevos casos-, muertes e internaciones por covid. Frente a este panorama, el Gobierno de Luis Lacalle Pou anunció la reapertura gradual de fronteras, la habilitación de fiestas con baile y el regreso del fútbol con público.