Si bien es inminente el anuncio de la vuelta del público a las canchas de fútbol del país, esta apertura será beneficio para unos pocos. Y habrá que pagar para tener ese privilegio. No solo porque se habilitarán solo el 30 por ciento de las ubicaciones sino que las mismas serán destinadas exclusivamente para socios y se dará prioridad a los que a marzo de 2019, al inicio de la cuarentena, tenían abono a platea. Es decir que de haber una demanda superior las ubicaciones irán a sorteo en cada partido, por lo cual, en principio, no hay forma de asegurarse el ingreso al Gigante de Arroyito o al Coloso del Parque por el resto de la temporada. Central tenía 10 mil abonados a plateas el año pasado, Newell’s alrededor de seis mil. Se estima que en la primera etapa de las aperturas se pueden habilitar seis mil ubicaciones aproximadamente, dado que las tribunas populares no serán abiertas. En Central esperan definir la semana que viene cómo distribuir las entradas disponibles, en Newell’s, en cambio, la situación seguramente quedará en manos de la Comisión Directiva que se imponga en los comicios del 19 de septiembre dado que el club hoy se encuentra al mando de solo dos directivos.