Marcelo Gallardo se despidió de Junín en medio de sabores encontrados: al dulce de la victoria se le fundía el amargo de la bronca. Es que la molestia del entrenador de River por la formación de emergencia que debió parar frente a Sarmiento, tras las cinco bajas por la convocatoria a las Eliminatorias Sudamericanas, pareció haber pesado incluso en medio de la alegría por una victoria tan importante como valiosa. A pesar suyo, las complicaciones tienen segunda parte: tampoco podrá recuperar jugadores esta semana y tendrá que volver a improvisar en todas las líneas para enfrentar a Independiente, en un duelo clave en la pelea por la punta del torneo de la Liga Profesional de Fútbol.

"Me parece que no es justo porque fuimos los más perjudicados", soltó Gallardo apenas terminado el 2-1 sobre Sarmiento. El DT se mostró aún más disgustado por el contexto que lo hará repetir las mismas complicaciones en la preparación del partido por la décima fecha, el clásico ante el Rojo en el Monumental: "Es difícil para cualquier entrenador, en cualquier liga del mundo, jugar un partido así, con muchos seleccionados repartidos en los representativos de sus países. Por eso era un rompecabezas armar este partido en fecha FIFA, y lo mismo nos va a pasar la semana que viene (por esta) y el mes próximo".

Como analizó el entrenador, el "rompecabezas" volverá como un boomerang para perfilar el once que enfrentará este domingo a Independiente, ya que Franco Armani, Julián Álvarez (Selección Argentina), Paulo Díaz (Chile), Robert Rojas y David Martínez (Paraguay) regresarán recién la semana que viene, cuando no haya competencia por las elecciones PASO. "A ningún entrenador del mundo se le dibuja una sonrisa cuando para un partido le sacan cinco o seis jugadores para llevárselos a las selecciones", lo analizó Gallardo.

Los únicos que trabajaron de manera especial este martes -el resto tuvo jornada de descanso tras la victoria- fueron los lesionados, quienes de todos modos no tendrán el alta médica para el fin de semana. Sólo el uruguayo Nicolás de la Cruz, con una fatiga muscular en el psoas izquierdo, podría llegar a recuperarse; pero tampoco es una buena noticia para el DT: en caso de estar en condiciones, deberá viajar a su país para sumarse a la fecha FIFA, ya que fue desafectado por esa lesión de los compromisos por Eliminatorias.

La lista de lesionados es apenas más chica que la de los convocados por las Selecciones para sus partidos rumbo al Mundial de Qatar. Al uruguayo se le suman Matías Suárez con su sinovitis en la rodilla derecha (el cuerpo técnico no lo quiere arriesgar para que esté presente en la recta final del torneo), los desgarrados Fabrizio Angileri y Jonatan Maidana (el domingo sumarán 18 días de recuperación kinésica), Javier Pinola con su fisura en el codo y Leonardo Ponzio con la recuperación de una miocarditis derivada de Covid-19 (ambos regresan en octubre).

De no mediar inconvenientes, el equipo para afrontar el clásico sería muy similar al que ganó en Junín, al menos en la defensa, donde Gallardo tuvo que improvisar con tres volantes centrales, Enzo Pérez, Felipe Peña y Bruno Zuculini, para armar la línea de fondo. La duda del sector está puesta en el lateral Alex Vigo, que no jugó un buen partido ante Sarmiento y fue reemplazado en el entretiempo por Felipe Salomoni, que hizo su debut en Primera. El juvenil de 18 años podría jugar por la banda izquierda si Milton Casco pasa a jugar por derecha.

El reducido plantel millonario, con 11 bajas a cuestas, regresará este miércoles a los entrenamientos en el predio de Ezeiza, ya pensando en Independiente y en la fecha 10. Quizás, más allá de las dificultades del puzzle que lo desafía de nuevo, sea hora para Gallardo de dejar aflorar la sonrisa luego del triunfo épico que sus dirigidos conquistaron para quedar a solo dos unidades de la punta.