La Universidad Nacional de La Plata (UNLP) se prepara para abrir las puertas de AMAU, el primer hotel de formación universitaria de Latinoamérica, que estará abierto a toda la comunidad para fomentar el turismo en la ciudad, mientras capacita a los estudiantes de esa casa de estudios.
Gestionado y administrado por la Facultad de Ciencias Económicas de la UNLP, este hotel escuela se encargará de capacitar a futuros profesionales en Turismo y Hotelería al mismo tiempo que también ofrecerá alojamiento para huéspedes docentes, investigadores, técnicos, congresales y funcionarios recibidos por la UNLP para el desarrollo de actividades académicas por períodos cortos.
Este aprovechamiento de las instalaciones de AMAU para que los estudiantes puedan realizar sus primeras prácticas profesionales fue considerado como “un plus de enorme valor en el proceso de formación” por las autoridades de la casa de estudios económicos.
“La construcción de este Hotel Escuela implica involucrarnos en los procesos de desarrollo de la ciudad y de la región. La UNLP organiza más de 300 congresos por año, de los cuales unos 50 son internacionales, y eso nos obliga a buscar espacios para realizarlos. Contar con un hospedaje propio para poder alojar a la gran cantidad de profesores e invitados que llegan a La Plata es fundamental”, sostuvo el presidente de la UNLP, Fernando Tauber.
Al llegar al número 692 de la calle 51, emerge un edificio blanco, inmaculado, recién construido. Ubicado en un terreno de 11 metros de frente por 60 de ancho, el hotel tiene una superficie cubierta de 3.100 metros cuadrados junto con 430 metros cuadrados de exteriores urbanizados, que incluyen una terraza para eventos, patios y un pequeño espacio destinado al estacionamiento.
Según explicaron desde la UNLP, el nombre AMAU tiene su origen en la palabra quechua "amauta", que quiere decir "bienvenido', "agasajado" y "recibido", y también en el juego de palabras "amar la universidad".
Ubicado en pleno centro de la ciudad de La Plata, sobre la calle 51, entre 8 y 9, a tan solo 50 metros del Teatro Argentino y a pocas cuadras de la mítica catedral de la ciudad, AMAU se destaca por ubicarse en un punto neurálgico de la metrópoli bonaerense, rodeado de sitios atractivos a nivel cultural, comercial y gastronómico. Además, está cerca de varias instituciones de la casa de estudios superiores: apenas cinco cuadras lo separan de la sede del Rectorado, de la Facultad de Ciencias Económicas y del Edificio Sergio Karakachoff, el complejo universitario que nuclea al Centro de Arte, la sede de Posgrado, el Centro de Convenciones, y los estudios de Radio y TV.
“En una ciudad universitaria, este es otro aporte fundamental que hacemos al desarrollo local, ampliando y jerarquizando la oferta turística para los miles de visitantes que año a año eligen a La Plata para disfrutar de su arte, su cultura, su historia y su espíritu tan ligado a la ciencia y al conocimiento”, expresó Tauber.
Accesible e inclusivo
Más allá de su ubicación, el hotel escuela también se destaca por su infraestructura: cuenta con 8 pisos, sin contar el subsuelo y la planta baja, y está habilitado para hospedar a más de 80 personas en sus 41 habitaciones, divididas entre opciones simples, dobles, matrimoniales y accesibles. Estas piezas tienen además una particularidad: más allá de contar con Wifi, caja de seguridad, aire acondicionado frío-calor, camas somier, baño privado completo, televisores LED de 32” con cable, frigo bar, pava eléctrica, set de vajillas, secador de pelo, escritorio y demás prestaciones frecuentes, cuentan con amueblamientos únicos, diseñados y producidos por estudiantes de la Escuela de Oficios de la universidad de La Plata.
Otra característica de este hotel universitario es que dentro de los 6 pisos destinados al alojamiento de huéspedes hay una planta completa de habitaciones con accesibilidad plena para personas con impedimentos motrices y sensoriales.
En la planta baja, que le presenta al huésped el moderno diseño minimalista que caracteriza la totalidad del hotel, se encuentra el acceso general, el lobby, el bar, y un área de acceso a aulas y salones de reuniones, junto con el área de ingreso al SUM, un auditorio con capacidad para 180 personas. “El gran hall de acceso en triple altura tiene un techo vidriado a través del cual se puede ver la torre del hotel”, detallaron desde la secretaría de Obras de la universidad sobre el área central del edificio, que vincula funcionalmente a los sectores más frecuentados del edificio.
En el primer piso se encuentran las aulas y los salones de reuniones, articulados mediante un hall de acceso que vincula tanto el área hotelera como el acceso independiente exterior. En esta planta se encuentra el auditorio, que es ideal para reuniones y eventos de todo tipo ya que está equipado con la última tecnología, una sala de reuniones y dos aulas de estudio, capaces de recibir a 80 estudiantes de forma simultánea.
Si bien el objetivo principal de AMAU es brindarles hospedaje a los visitantes del mundo académico nacional e internacional que participen de congresos y eventos de la universidad, las autoridades del hotel no descartan la posibilidad de abrirle las puertas a cualquier turista que lo requiera. Desde la Secretaria de Prensa del hotel indicaron al Suplemento Universidad que “seguramente será así”, ya que se trata de “un hotel abierto a toda la comunidad”, pero aclararon que aún no está definido. Algo similar ocurre con la fecha de apertura, que todavía no pudo marcar su lugar en el calendario. Lo que sí confirmaron a este diario es que las puertas estarán abiertas antes de fin de año.
Mientras tanto, con los visitantes a la espera de la apertura del hotel escuela, desde AMAU tienen pensado habilitar la zona académica, localizada entre la planta baja y el primer piso, para poder realizar eventos y conferencias a partir de septiembre.


