En marzo pasado, un taxista insultó y se bajó los pantalones delante de una trabajadora de prensa frente al Concejo, en medio de una protesta del sector. Esa actitud generó que el Municipio le sacara la licencia. Ante ello, su hija, que trabajaba con el mismo auto y con la aplicación She Taxi, sufrió las consecuencias ya que perdió su fuente laboral. Tras varios reclamos, ayer la mujer firmó en la Municipalidad un convenio de transferencia de la licencia que le permitirá recuperar el trabajo. "Es un nuevo logro del feminismo", celebró la abogada Sofía Basso, que representó a la taxista, junto a su colega Vanesa Vargas. "Que se haya logrado este entendimiento es importante porque era una situación injusta", dijo María Eva Juncos, creadora de She Taxi, la aplicación que desde 2016 contacta usuaries con conductoras mujeres. Además, las trabajadoras nucleadas en esa plataforma digital presentaron en el Concejo Municipal un proyecto por licencias extraordinarias hacia la paridad de géneros al volante (ver nota aparte).  

El episodio de violencia de género que protagonizó el taxista derivó en que el Ente de la Movilidad le quitara la licencia. Como consecuencia de ello, se quedó sin trabajo su hija, quien por aquellos días se maniestó avergonzada por la situación y por la reacción de su padre cuando una cronista le pidió a un grupo de conductores que corrieran sus autos para poder retirar el móvil, tras la cobertura de la protesta. 

Ariana es madre y sostén de hogar, por lo que sus compañeras de la plataforma digital She Taxi reclamaron desde un primer momento que la chapa que pertenecía a su padre le fuera adjudicada, ya que ella necesita el trabajo. Además, en su momento eran dos las mujeres que trabajaban con el mismo auto. 

Durante seis meses, las abogadas de la conductora hicieron varios pedidos para que ella pueda volver a trabajar. Y ayer lograron la firma del convenio. El mismo expresa que "(...) se ha arribado al presente acuerdo con el fin de garantizar el sustento y la continuidad del servicio en cabeza Ariana Beatriz". "Lo que hicimos fue recuperar esa chapa que el municipio cauteló. Fue un reclamo administrativo planteado con una visión feminista. Lo que hicimos fue encuadrar el reclamo en todo lo que tiene que ver con lograr un ambiente libre de violencia para mujeres y el colectivo LGBT. En este caso, su hija se quedó sin fuente de trabajo, siendo una mujer que materna a un niño de un año. Planteamos que al tomar esa decisión, se dejó a la peona todos estos meses sin trabajo. La novedad es que una vez más el feminismo logra restaurar la situación a través del diálogo y fundamentos con impronta feminista. Por eso interpretamos que es un logro del feminismo", explicó Basso. 

La abogada indicó que "si bien el padre queda inhabilitado para el servicio público, su hija queda como titular y tendrá su fuente trabajo garantizada". Sumado a ello, en el caso se da "la posibilidad es que ese taxi sea compartido con una peona mujer, y equilibra el tema de la paridad en los taxis". Y agregó: "Entendemos que la municipalidad escuchó y se pudo entender el planteo, para avanzar".