El entrenador de Boca Juniors, Sebastián Battaglia, mantiene la incógnita sobre quién jugará de volante por la derecha, si será Diego González o Esteban Rolón, en el Superclásico ante River en el estadio Monumental.

En la segunda práctica de fútbol de la semana, el técnico ubicó en Ezeiza el mismo equipo que el jueves, con el único cambio de González por Cristian Medina.

El plantel formó con Rossi; Advíncula, Izquierdoz, Rojo, Fabra; González, Campuzano, Almendra; Cardona; Pavón, Orsini. La única duda del entrenador estaría en el sector derecho, en donde paró a González, pero Rolón también podría jugar en esa posición.

Battaglia, en la práctica del jueves, probó en ese lugar al juvenil Medina, mientras que Rolón jugó en el segundo equipo en su posición habitual de volante central. Ahí se pensó que perdía consideración en el cuerpo técnico, para ser titular el próximo domingo.

Sin embargo, aunque no haya estado para los posibles titulares en las dos prácticas de fútbol de la semana, el ex Huracán, una de las cuatro incorporaciones de este semestre, puede tener chances de estar desde el arranque.

En la victoria 1-0 ante Colón, actual campeón del fútbol argentino, Rolón jugó el domingo pasado como volante central, y cumplió una de sus mejores actuaciones desde que llegó a Boca en julio pasado. El otro candidato, González, quien jugó en la práctica del viernes, tiene más proyección por sorpresa que Rolón, y también la experiencia que le dan sus 33 años y de saber mucho de este tipo de partidos.

En tanto, parece que Pavón se quedará con el otro puesto que parecía que no estaba definido, y en donde se pensaba que podía estar Norberto Briasco, para acompañar en la ofensiva al centrodelantero Nicolás Orsini.

La otra duda que se mantiene en el plantel es cómo va a salir a jugar el equipo, si con la actitud de ser protagonista como fue desde el comienzo del ciclo de Battaglia, o quizás más a la espera ante las características del adversario. 

Con una táctica más conservadora, y con presión en el medio, el anterior técnico Miguel Russo no perdió este año contra River, con cuatro empates, tres de ellos en la Bombonera. Y dos de esos encuentros Boca los ganó en la definición por penales, el último cuando lo eliminó en la Copa Argentina.

La novedad de la práctica en Ezeiza fue que Agustín Almendra se entrenó en forma normal, e hizo fútbol con el resto de su compañeros, ya recuperado de una molestia en el músculo isquiotibial izquierdo. 

El plantel de Boca se entrenará el sábado desde las 9 en el complejo Pedro Pompilio, y ahí se verá si el técnico vuelve a parar un posible equipo, o hace como en los últimos encuentros, en donde solo realiza ejercicios tácticos. Jugadores y cuerpo técnico almorzarán en el predio de Casa Amarilla, para quedar después concentrados en un hotel del barrio porteño de Monserrat.