Argentina es uno de los principales mercados de desarrollo de videojuegos junto con Estados Unidos y Canadá. Este año se estima que la facturación llegará a los 86,7 millones de dólares con casi 2000 personas trabajando en el sector, de las cuales el 13 por ciento son mujeres, según un informe del Observatorio de la Industria Argentina de Desarrollo de Videojuegos, proyecto público-privado que integran la Universidad Nacional de Rafaela y la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos Argentinos (ADVA).

El 91 por ciento del público de los juegos creados en la Argentina tiene entre 18 y 35 años. Mariano Obied, presidente de ADVA, cuenta que "durante la pandemia hubo una alta demanda de productos digitales y entretenimiento. Cuando gran parte del mundo se encontraba bajo confinamiento, las grandes empresas aprovecharon y salieron con productos nuevos, contenidos gratuitos, había mucha demanda. Lo que pasó fue que las empresas medianas -las que suele haber en Argentina- tenían pautas de lanzamiento de juegos que, ante la vorágine de las grandes empresas, vieron diluidas las ventas con respecto a la expectativa que tenían".

Las empresas consultadas en el relevamiento realizado por ADVA muestran que esta es una industria joven donde el 71 por ciento se constituyó entre el 2015 y el 2020, mientras que el 15 por ciento se formalizó en el período anterior entre 2010 y 2014. A su vez, el 37 por ciento de los estudios de desarrollo de videojuegos encuestados reporta que todavía no ha lanzado ningún videojuego a la fecha.

"Lo que sucede en Argentina es que los juegos son desarrollos para agencias o para clientes internacionales que tienen oficinas en Argentina. No hay un mercado de consumo propio. América Latina representa un 14 por ciento de la facturación de la industria del juego a nivel global. Esto no quita que el crecimiento del tamaño de la industria fue de un 20 por ciento, lo cual es un montón y excede las métricas que nos esperábamos", agrega Obied.

Ahora bien, con respecto a los trabajadores del sector, dependiendo de la actividad que se realice las posibilidades de trabajar como freelancer o en relación de dependencia varían. El informe muestra que los programadores y los artistas gráficos suelen estar contratados en relación de dependencia mientras que aquellos empleados que realizan tareas como las voces o los sonidos se encuentran trabajando freelance.

Los tipos de videojuegos que se desarrollan en argentina son, en su mayoría, juegos causales/sociales que representan un 53 por ciento; los educativos, que representan un 29 por ciento y le siguen los de acción con un 27 por ciento. Ahora bien, los diferentes juegos se desarrollan para diferentes plataformas; tales como celular, PC/MAC, web, consolas fijas, entre otros. La gran mayoría (el 74 por ciento) de los juegos que se desarrollan son para los celulares y para PC (el 71 por ciento).

¿Cómo se financia esta industria? El 66 por ciento sale de aportes del emprendedor, dueño o socio. El 9 por ciento de publishers, un 6 por ciento de subsidios del sector público y un 4 por ciento de concursos/premios, según el informe de ADVA. El acceso al financiamiento en esta industria es inestable, el 51 por ciento de los estudios afirma haberse perdido de hacer inversiones o llevar adelante proyectos por falta de fondos. "Antes de la pandemia las rondas de negocios eran el mejor lugar para conocer publishers, que son como una editorial o una discográfica solo que de videojuegos. Son empresas que invierten en proyectos para terminar de hacerlo y tiene muy aceitado el circuito comercial. Con la pandemia esto dejó de suceder, se volvieron reuniones virtuales lo cual nos permitió acceder a conocer más publishers, pero así como nos pasó a nosotros les pasó a muchas regiones con intenciones de diversificar. Este año entendimos más la dinámica, fuimos a menos reuniones y cerramos más tratos", explica el presidente de ADVA.

Los principales obstáculos que tiene el sector son la inestabilidad económica, el acceso al financiamiento, falta de personal calificado, la incertidumbre con respecto a la demanda del producto y los elevados costos de desarrollo.

"La industria del videojuego facturaba más que la música y el cine juntos, hoy factura más que el cine y el deporte. Es decir, que es aún más grande y no para de crecer. La verdad es que el porcentaje que representamos a nivel global es pequeño pero tenemos mucho potencial. En cada producto de empresas grandes siempre hay un argentino involucrado.Simplemente necesitamos políticas que nos acompañen. Porque en Argentina hay mucha capacitación al respecto, carrera universitarias, terciarias, cursos. Las personas están capacitadas, necesitas políticas públicas que quieran impulsar este mercado que no para de crecer", concluyó Obied.