La situación epidemiológica en Alemania atraviesa un momento crítico al registrar la tasa de incendencia de nuevos casos más alta desde el inicio de la pandemia de Covid-19, al mismo tiempo que la campaña de vacunación quedó casi paralizada por debajo del 70% de la población, por lo que se impusieron restricciones específicas. "Para los no vacunados hay un riesgo alto de que se contagien en los próximos meses", advirtió Lothar Wieler, jefe del organismo federal de vigilancia epidemiológica Instituto Robert Koch (RKI).

La tasa de incidencia que mide el número de casos aparecidos durante la última semana, cada 100.000 habitantes, marcó un registro máximo de 201. La marca máxima precedente, de 197,6, databa del 22 de diciembre de 2020, según el último balance , informó la agencia de noticias AFP. Esas cifras alcanza al doble en algunas partes del país como el estado federal de Sajonia, donde la tasa de incidencia es de 491,3.

Frente a este aumento de casos y con más del 30% de la población sin vacunas, las autoridades lanzaron una serie de medidas restrictivas para las personas sin vacunar. El acceso a restaurantes y otros eventos en interiores solo estarán habilitados a personas con el calendario de vacunación completo o con un test PCR, ya que los test de antígenos dejan de ser válidos.

Las pruebas rápidas sobre Covid-19 --test de antígenos-- dejaron de ser gratuitas para todos hace un mes en Alemania, como parte de las medidas para incentivar a más gente a vacunarse. Con la tasa de incidencia en aumento hay presiones públicar para que vuelvan a ofrecerse de manera gratuita, mientras que las autoridades intentan fortalecer la campaña de vacunación y lanzaron dosis de refuerzo para cualquiera que se vacunara hace seis meses o más, según informó el sitio Euronews. 

Los contagios diarios también marcan récord en Alemania

El viernes pasado, Alemania batió un nuevo máximo histórico de contagios, con más de 37.000 infecciones registradas en un solo día. El fin de semana la cifra descendió a  15.513 nuevos contagios y 33 muertos, pero se espera conocer las cifras de este lunes con un repunte similar al de la semana pasada, que terminó con dos días consecutivos de cifras récord.  

Las autoridades alemanas --en momentos en que el país atraviesa un recambio en el Poder Ejecutivo tras las elecciones legislativas que marcan el fin de la era Merkel--señalaron que los hospitales se estaban llenando en las regiones más afectadas, como Sajonia. 

Según el informe diario del RKI del viernes, se reportaron 1.071 hospitalizaciones por coronavirus y una tasa acumulada de ingresos en siete días de 3,91 por cada 100.000 habitantes. El momento más diíficil que atravesó Alemania durante la pandemia fue la Navidad pasada, cuando la tasa acumulada de ingresos llegó al 15,5. 

El jueves la cifra de pacientes con Covid-19 en las unidades de cuidados intensivos se situaba en 2.332, un incremento de 106 internaciones en un día,  lo que significaba un nivel de ocupación del 10,4 % de las camas disponibles.

Hasta el viernes, el 69,7 % de la población de Alemania había sido vacunada, el 67,1 % con la pauta completa. La cifra se ha estancado en las últimas semanas y no logra alcanzar el 70%.