Luego de romperla en el Lollapalooza, Bandalos Chinos regresa a los escenarios porteños para presentar su más reciente material, En el aire, en el que vuelve a apostar por el EP, tras lanzar en ese formato, en 2014, Nunca estuve acá. “Es por puro capricho”, reconoce el guitarrista Iñaki Colombo. Aunque el vocalista y tecladista Goyo Degano argumenta: “Los temas Isla y El verano estaban grabados. La intención era llegar a fin de año con un material en la calle, tocarlo y reinventar nuestro show. Así que empezamos a organizar, entender y ver qué llevábamos al estudio”. Y el violero finiquita: “Teníamos otras ideas dando vueltas que sentíamos que terminaban en ésta. Las agrupamos, hicimos borrón y cuenta nueva, y encaramos el disco”. La obra del sexteto es un trabajo de corta duración digital que apareció en YouTube el 22 de diciembre. Luego sacaron un CD-R para difusión. Aunque advierten: “Quizás lo editemos físicamente”.

El grupo sanisidrense volvió a poner sus fichas en ese pop travesti, ataviado y maquillado por sintetizadores colchoneros y guitarras etéreas, con ganas de poner un pie en la pista de baile. “En el aire es re popero aunque con algo más de orquestación”, detalla Iñaki. Y Goyo agrega: “Es muy delgada la línea entre lo que puede ser grasa y lo que está bárbaro. Nuestra referencia es nuestro gusto: ponemos todo en duda”.

Nada es fortuito en Bandalos Chinos. “Hay un par de hermanos en la banda, así que imaginate lo que nos puteamos. Pero el ida y vuelta es constante y muy productivo”, describe el guitarrista. Mientras el frontman de esta agrupación, que levanta la bandera de la independencia siguiendo el modelo de El mató a un policía motorizado y Los Espíritus, dilucida: “Existen dos cabezas a nivel de producción, que son Iñaki y su hermano Salvador. Son los que manejan la compu, graban y abren el juego. La última palabra les queda a ellos”.

Si bien En el aire contiene una tema inspirado en la novela La isla a mediodía de Julio Cortázar, el resto del repertorio se ajusta a lo que llaman “canción experimental”. “Jugamos con las palabras todo el tiempo y para muestra está el nombre del grupo”, ilustra Iñaki antes de cederle el turno a Goyo: “Las letras no son tan directas. Es lo menos pop que tenemos. En ese sentido, seguimos el trabajo de Cerati”.

 “Queremos que las canciones suenen lindas y musicales. El desafío es hacer de algo críptico un tema bailable”, dice el violero. Y es por eso que Bandalos Chinos se tornó en un referente del indie local. “Cuando nos escuchás por primera vez, notás la coquetería y la pretensión. Pero hay sinceridad detrás de eso”, define el cantante de melena colorada. “Creemos que acá hay un público que se banca cinco sintetizadores sobre el escenario. Es cuestión de tiempo ver que, aparte de la tradición del rock argentino, hay espacio para lo ecléctico.”

* Viernes 19/5 en Niceto Club, Niceto Vega 5510. A las 20.