Distintas figuras públicas del campo del arte, el periodismo, los derechos humanos y la gastronomía se sumaron a la campaña "basta de venenos", una iniciativa que advierte sobre la utilización de agrotóxicos en Argentina, el país que más uso le da por persona por año en el mundo a estos productos químicos. 

"La campaña #BastaDeVenenos está enfocada en difundir e instalar esta problemática en sectores más amplios de la población, con el propósito de promover la toma de conciencia sobre cómo el modelo de producción agropecuaria está afectando tanto la salud de productorxs, trabajadorxs y comunidades rurales, así como a todxs quienes vivimos en las ciudades y al ambiente en general", expresaron desde el colectivo a través de un comunicado.

En este sentido, indicaron que el objetivo es "dar visibilidad al hecho de que todxs estamos expuestxs a los agrotóxicos" así como "brindar información a las personas que no tienen presente esta problemática, o si la tienen, no terminan de comprender cómo y cuánto las involucra".

"Somos un grupo de organizaciones territoriales, organizaciones de la sociedad civil, vecinos y vecinas de localidades directamente afectadas por los agrotóxicos, médicos/as, científicos/as, abogados/as y personas del mundo artístico que estamos luchando por un cambio de este modelo y que deseamos contribuir a un cambio agroecológico para la producción de alimentos sanos", concluyeron.

Leonardo Sbaraglia, Julia Mengolini, Nora Cortiñas, Francis Mallman, Laura Azcurra, Hilda Lizarazu, Alejandro Bercovich y Susy Shock son algunas de las personas que sumaron su voz a la campaña, que se propone tomar conciencia sobre el uso de los agroquímicos. Esta práctica no sólo afecta a las comunidades rurales o pueblos "fumigados", sino también a los habitantes de las ciudades que reciben el impacto de los químicos a través de las frutas y verduras que se consumen.

"Los agrotóxicos están en el aire que respiramos, en el agua que tomamos y en los alimentos que comemos", graficaron en sus redes. En esa línea,  alertaron que "todos estamos expuestos a los daños que genera el glifosato y otros químicos que son utilizados en las producciones agrícolas". 

"Yo me hice el test y me dio detectable, esto quiere decir que tengo glifosato en mi organismo, en mi cuerpo. Y yo no vivo cerca de un pueblo fumigado, vivo en plena ciudad de Buenos Aires. Me da mucha bronca, tenemos que empezar a organizarnos para combatir este modelo que nos está envenando", denunció Mengolini en el video.

Por su parte, maestras rurales y habitantes de pueblos expuestos a los agroquímicos dieron su testimonio en esta campaña y detallaron los daños físicos que les generan a ellas y a sus familias. 

"Hace unas semanas me detectaron glisfosato en la orina, y mi hijo de cuatro años también está ingiriendo este agrotóxico a través de la leche materna. La única salida que tenemos es darle batalla a esta matriz productiva que nos está matando", aseguró Jimena Martínez, politóloga que vive en Campana, provincia de Buenos Aires.

Críticas a la iniciativa 

Ante la difusión de la campaña, la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (Casafe) emitió un duro comunicado, donde sostuvo que detrás de todos los alimentos y productos hay miles de profesionales del agro, científicos y reguladores que estudian durante muchos años para garantizar la seguridad de lo que consumimos y utilizamos.

"Somos personas que al igual que ustedes se preocupan por lo que comemos, por el ambiente y por la salud. Por eso nosotros también decimos BASTA. Basta de estigmatización, basta de grietas, basta de argumentos sin ciencia, #BastaDeMiedos", expresaron.

A su turno, desde la Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y agroquímicos (CIAFA) manifestaron: "No ponemos en duda la inquietud de las personalidades que participan en el video, pero los argumentos esgrimidos no son fundados en conocimiento científico y lo que se consigue es generar miedo".

"Desde CIAFA manifestamos nuestra preocupación y nos oponemos a este tipo de campañas que difama a quienes día a día trabajan para una producción de alimentos sanos y sustentables", apuntaron.