En una semana movida para la diplomacia de Rusia, Estados Unidos, Ucrania y los países aliados de la OTAN, por una supuesta acción militar de Moscú en Ucrania denunciada por occidente, el Kremlin exigió respuestas concretas a las garantías de seguridad solicitadas a la alianza militar de occidente: un freno a la expansión hacia el este y el repliegue de tropas de la OTAN en los países que adhirieron al mecanismo después de 1997. Además, el canciller ruso Serguei Lavrov pidió a Estados Unidos que termine con la retórica de la existencia de una "agresión rusa", especulaciones a las que los países escandinavos respondieron. 

Suecia por su parte movilizó tropas a Gotland, su isla en el mar Báltico a la que Rusia podría acceder vía San Petersburgo y Kaliningrado, según el gobierno sueco podrían ser atacados por Moscú . Mientras que Dinamarca sumó cuatro aviones de combate a la patrulla aérea de la OTAN sobre los países bálticos.

Rusia pide respuestas concretas

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov habló por teléfono con su par estadounidense Antony Blinken, y reiteró el pedido a Washington para que “ofrezca respuestas concretas y comentarios detallados cuanto antes” a las garantías de seguridad solicitadas por el Kremlin el mes pasado. Una de las garantías es la no incorporación de Ucrania a la alianza militar de occidente, así como el retiro de tropas y armamentos de los países que ingresaron a la OTAN después de 1997: Polonia, Hungría, Croacia, Lituania, Estonia y otros países Balcanes.

Además el diplomático ruso pidió un freno a la difusión de especulaciones sobre una presunta “agresión rusa”. "En el contexto de la situación en el sureste de Ucrania, el ministro pidió al secretario de Estado que no difundiera más las especulaciones sobre una supuesta 'agresión rusa' que se está preparando, sino que obligara a las autoridades en Kiev a cumplir plenamente los acuerdos de Minsk", precisó el ministerio de Exteriores ruso en un comunicado tras el encuentro. Por su parte el secretario de Estado norteamericano resaltó la importancia de “continuar con la vía diplomática para desescalar tensiones”, precisó su portavoz Ned Price.

La difusión del miedo

La retórica de la “agresión rusa” denunciada por Lavrov se comprueba con el envío de cientos de tropas suecas a la isla Gotland, ubicada en el mar Báltico, al que Rusia accede vía Moscú y Kaliningrado. El ministro de Defensa de Suecia, Peter Hultqvist advirtió que el país escandinavo podría ser atacado. Aunque Suecia no integra la OTAN, sí forma parte de algunos ejercicios militares de la alianza. El viernes pasado la Casa Blanca alertó que Moscú podía crear un falso pretexto para invadir a Ucrania. Este martes Dinamarca se sumó a las acciones de defensa reforzando la patrulla aérea de la OTAN con cuatro aviones de combate F-16 que serán desplegados en Lituania. Según el vocero de la OTAN, Piers Cazalet, el despliegue adicional patrocinado por Copenhague “se produce en el contexto de la crisis actual provocada por el continuo refuerzo militar de Rusia dentro y cerca de Ucrania”.

En tanto el canciller estadounidense, Antony Blinken, viajará este martes a Ucrania donde el miércoles tiene previsto reunirse con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski. Después en Berlín mantendrá reuniones con el Reino Unido, Francia y Alemania para finalmente reunirse el viernes en Ginebra con su par ruso, el ministro de exteriores Sergeui Lavrov.

Tropas rusas

Con el despliegue de miles de tropas rusas en su frontera con Ucrania, el Kremlin aseguró que para llevar adelante una desescalada la OTAN tiene que ofrecer garantías de seguridad, principalmente que no ampliará su influencia militar hacia el Este. Este martes Lavrov también dialogó con su homóloga, la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, ante quien volvió a remarcar la importancia de las garantías solicitadas.

 "Es un asunto muy serio y no se puede seguir demorando la concertación de acuerdos concretos sobre las garantías de seguridad", afirmó Lavrov que a su vez rechazó el pedido de retirar las tropas rusas desplegadas en la frontera ruso ucraniana y afirmó que esos militares “no amenazan” a nadie. Baerbock por su parte señaló que "más de 100.000 soldados rusos, equipos y tanques fueron desplegados cerca de Ucrania, sin razón. Resulta difícil no ver eso como una amenaza”.

Reunión entre Alemania y la OTAN

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que invitó a Rusia y a los países de la alianza militar a una nueva ronda de negociaciones. El titular de la OTAN se reunió este martes con el jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz. Ambos llamaron a una desescalada de conflicto con Rusia y priorizaron evitar una confrontación armada. "Queremos que las relaciones con Rusia sean mejores y constructiva, a nadie le sirve que haya tensiones", dijo Scholz.

Stoltenberg, por su parte, afirmó que si Rusia elige la “violencia” se enfrentará a un alto precio político y financiero, además señaló que los aliados de la OTAN apoyarán a Ucrania en su derecho a la autodefensa. Según reveló The Guardian, el lunes un avión militar del Reino Unido envió armamento antitanque a Ucrania. En este sentido, Scholz fue consultado sobre su apoyo a la decisión británica de proveer armamento a Ucrania. El canciller evitó responder y recordó que Alemania tiene un principio de no exportar armamento letal a zonas de conflicto. "Hay un principio claro y es que no exportamos armamento letal y eso no ha cambiado", dijo Scholz.