Cambian los jueces, pero algo no se modifica: el placer de viajar del exdirector general de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Gustavo Arribas. El escribano pidió que lo autoricen a ir de viaje hacia Brasil y los Emiratos Árabes Unidos, donde lo esperan para hacer negocios vinculados al mundo del fútbol –la pasión que comparte con su amigo Mauricio Macri.

Después de que el juez Martín Bava se desprendiera de todas las causas que tramitan en Dolores, Arribas presentó una solicitud para salir del país que deberá ser resuelta por el juez Julián Ercolini. Una de las querellas ya se opuso a que le concedan el permiso.

El viaje de Gustavo Arribas

Arribas quiere viajar a Sao Paulo, donde viven su esposa y su hija menor, entre el 23 de febrero y el 25 de abril. En el medio, planea colar un viaje a Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos, entre el 26 de febrero y el 6 de marzo. Allí, lo esperan de una empresa llamada Sapphire Sports Management.

El exSeñor Cinco ya había pedido permiso para ir a los Emiratos en noviembre pasado. En ese momento, la abogada querellante Valeria Carreras advirtió una serie de irregularidades en la invitación. Entonces la letrada dijo que si bien la nota tenía firma, no llevaba el nombre del firmante. Tampoco había membrete ni teléfono ni otros datos de la compañía. Por el contrario, la única empresa que halló Carreras con ese nombre estaba radicada en el Reino Unido e inactiva desde hace años. En ese momento también la fiscalía de Dolores había alertado sobre la situación, pero el juez Bava no tuvo otra opción más que autorizar a Arribas porque ésa era la línea que había establecido la Cámara Federal de Mar del Plata.

En esta oportunidad, la carta de invitación lleva firma y nombre, aunque tiene una leyenda que marca que fue firmada digitalmente por Jorge Sourigues, el abogado de Arribas.

Riesgo de fuga

“Advertimos que haber presentado el pedido de autorización de salida del país de la misma forma en que lo hizo el año pasado – sin cuidar los requisitos legales o justificar que se trata de un trabajo real que amerita la salida del país con rumbo a un lugar que no tiene convenio de extradición– es un riesgo de fuga y, a la vez, una burla”, le dice Carreras a Página/12. “Ojalá que la justicia esté a la altura, pero lo dudamos. No creemos en Comodoro Py”.

Arribas, en su escrito, remarca que siempre estuvo a derecho y ofrece suspender su viaje si es requerido por los tribunales federales. El exdirector general de la AFI tiene tres procesamientos. Dos de ellos fueron dictados en Dolores en las causas en las que se investigó el espionaje en provincia de Buenos Aires –Proyecto AMBA– y en la que se indagó en la vigilancia sobre las familias de los tripulantes del ARA San Juan. Esos dos expedientes están desde esta semana en manos de Ercolini, después de que la Cámara Federal de Casación le sacara al juez Bava la causa madre de esas investigaciones: la que orbitó alrededor del falso abogado Marcelo Sebastián D’Alessio.

Espionaje a Cristina Kirchner 

Además, Arribas fue procesado en 2020 por el juez de Lomas de Zamora Juan Pablo Augé por el espionaje a Cristina Fernández de Kirchner en el Instituto Patria. En diciembre pasado, el escribano se anotó una victoria importante cuando la Cámara Federal porteña –con los votos de Mariano Llorens y Pablo Bertuzzi– revocó el procesamiento que tenía en la otra causa que había tramitado en esa jurisdicción, la de los Súper Mario Bros y el espionaje penitenciario, al considerar que Arribas podría haber sido ajeno al esquema de espionaje que llevaron adelante los agentes que reportaban en la propia AFI.