El cierre de la temporada de verano 2022 confirmó los resultados que se venían dando desde mediados de diciembre: viajaron 32,3 millones de turistas por el país con una estadía media de 4,6 días y dejaron un impacto económico directo de 584 mil millones de pesos. Son 44,1 por ciento más de  turistas que el año pasado, y 2,4 por ciento más que en 2020, la temporada previa a la pandemia, y hasta ese momento considerada récord. 

El gasto a precios constantes, es decir, quitando el efecto inflación, fue casi el doble que en el verano pasado y 20 por ciento mayor que en 2020. Ese fuerte incremento se explica tanto porque viajaron 10 millones de personas más que el año pasado, como también porque la estadía media fue sustancialmente mayor, pasó de 3,8 días a 4,6. Los datos fueron publicados por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME)

Si se suman además los excursionistas, es decir, quienes visitaron pero no pernoctaron en ese destino, se hicieron 66,8 millones de viajes en dos meses y medio del verano con un desembolso total de 635.920 millones de pesos. Solo en el feriado de carnaval viajaron 3,5 millones de turistas y excursionistas que gastaron 53.100 millones de pesos.

El desembolso promedio diario fue de 3904 pesos por turista y 1700 pesos por excursionista. La Pampa estuvo entre las provincias de menor gasto diario, de 3700 pesos, mientras que Tierra del Fuego fue la de mayor costo, alcanzando los 10.000. El mayor gasto diario se observó en febrero, con 4200 pesos por persona. Esto se debe al aumento en los precios de la gastronomía y algunos servicios recreativos, y por otro lado, al feriado de Carnaval que incrementó la proporción de personas que abonaron entradas a las celebraciones.

El programa Pre-Viaje fue una de las novedades del verano. Hasta diciembre habían ingresado 4,5 millones de personas con una facturación de 100 mil millones de pesos. Bariloche fue la ciudad más elegida por las beneficiarias de ese plan, con 16.000 millones  de pesos en comprobantes cargados en esta temporada. Aún queda el resto del año para utilizar los beneficios del programa, pero más de 3 millones de personas viajaron por esta modalidad en el verano.

Destinos

El 34 por ciento de los turistas, unos 11 millones, se dirigieron a destinos de la provincia de Buenos Aires, especialmente a la costa. Otro 18,4 por ciento fue a la provincia de Córdoba, con casi 6 millones de visitantes y consolidó la mejor temporada de su historia. Entre Ríos recibió 1,5 millones, 4,7 por ciento del total, mientras que Mendoza estuvo cerca del millón, un 3,4 por ciento del total.

Por destinos, Mar del Plata, Pinamar, Villa Gesel, Bariloche, Mendoza, Villa Carlos Paz, Monte Hermoso, San Martín de los Andes, Merlo, Iguazú, Salta, Federación, Gualeguaychú, la zona de Quebrada de Jujuy y los valles de Tucumán fueron algunas de las ciudades con mayor movimiento en el verano. Mar del Plata fue la que más visitantes concentró, con 2,5 millones de arribos, de los cuales 1,5 millones fueron entre el 15 de diciembre y el 15 de enero y otros 300 mil en el fin de semana de Carnaval. La temporada le dejó ingresos directos por unos 60 mil millones de pesos a esa ciudad.

"El tipo de cambio alto, los trámites sanitarios para ingresar a otros países, sumado a la incertidumbre sobre la tendencia futura de la covid favorecieron a los destinos nacionales, que fueron priorizados por sobre países como Brasil, Uruguay, Chile y la ciudad de Miami, polos de turismo que compiten con los argentinos en los sectores con ingresos medios y altos", explicaron desde CAME.

Desde la entidad destacaron el despegue del turismo rural en estancias, cabañas y casas rurales. Esta temporada se le sumó el glamping,  es decir camping glamoroso. Los principales demandantes de este tipo de propuestas son los residentes de Ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires, pero la convocatoria se va extendiendo. Los prestadores de turismo rural hicieron mucho hincapié este verano en los paisajes, la gastronomía exclusiva y actividades al aire libre en contacto con la naturaleza.