Gerónimo Rulli (7): Muy firme en el juego de alto. Bajó varias pelotas con seguridad y dominio del área. En la jugada del penal a Ecuador, le sacó un cabezazo a Plata y después, le detuvo el remate a Mena, pero no lo pudo contener. Una actuación auspiciosa de cara al Mundial.

Gonzalo Montiel (5): En el primer tiempo, su costado fue una ventana abierta por la que siempre entraron los ecuatorianos. Lo complicaron la velocidad de Estrada e Ibarra y las subidas de Estupiñan y le costó volver cada vez que se proyectó. Se afirmó en la segunda etapa. Pero no tuvo una buena noche.

Lucas Martínez Quarta (6): Debió reforzar el costado derecho por donde hacía agua Montiel. Cruzó varias veces a sus espaldas y también estuvo firme en los manos a mano. Cuando la defensa se acomodó mejor, ya no tuvo necesidad de ir tanto al lateral y jugó mas ordenado.  

Nicolás Otamendi (8): En el primer tiempo, debió cruzar varias veces sobre la derecha y ganó. Salió jugando bastante bien y el arquero Galíndez le sacó un cabezazo. Estuvo firme otra vez yendo al choque sobre los delanteros de punta ecuatorianos. En el balance de los noventa minutos, fue el mejor jugador argentino.   

Nicolás Tagliafico (6): Cerró bien en defensa y fue arriba con claridad. Sirvió el centro en el gol de Julián Alvarez. Después, entró demasiado en la falta y la fricción y ya no subió tanto. En el penal, le cobraron una mano que no existió.

Rodrigo De Paul (6): Sufrió la intensa presión ecuatoriana en el comienzo. Lo obligaron a recibir de espaldas y lo golpearon bastante. Cuando esa presión aflojó y pudo encontrar la pelota, se soltó en ataque, combinó bien con Messi y recuperó su ida y vuelta intenso. Lo agobió el calor y el cansancio en el segundo tiempo.

Leandro Paredes (6): También lo complicó por la presión de los ecuatorianos y tuvo que meterse entre los dos marcadores centrales para darles una mano. Después del gol de Julián Alvarez, se afirmó en la mitad de cancha, hizo valer la certeza de su toque y puso buenos pases por adentro. En el complemento, volvió a retrasarse y perdió claridad, metido en la fricción imperante.

Alexis Mac Allister (6): Volvió a cerrarse sobre el medio para abrirle el lateral a Tagliafico. La presión ecuatoriana también lo incomodó. Cuando tuvo la pelota, mostró atrevimiento.  Pero se excedió en las faltas cuando le ganaron las espaldas.   

Lionel Messi (6): Tocó su primera pelota a los 12 minutos del primer tiempo. Después, debió bajar demasiado para entrar en juego. Cuando lo hizo, manejó bien los tiempos para enfriar el empuje ecuatoriano y tuvo buenas conexiones con De Paul. Cuando quiso encarar y pasar, ya no tenía piernas para hacerlo. Terminó casi en posición de volante derecho, dándole al equipo una mano sacrificada.

Julian Álvarez (6):  Le costó recibir en el comienzo, la presión ecuatoriana lo alejó de sus compañeros. En la primera pelota clara que le quedó anotó su gol. Hizo un aporte  en defensa, apretando la salida de los defensores ecuatorianos.  

Nicolás González (6): En los peores momentos del primer tiempo, le dio salida a la Selección con sus corridas por la izquierda. Armó una buena sociedad con Tagliafico para el ida y vuelta por el costado y tuvo resto para estar en las dos áreas. Se desinfló luego, se quedó sin aire para seguir corriendo y fue reemplazado.

Exequiel Palacios: Ingresó por Alexis Mac Allister pero no tuvo su despliegue. Quiso tocar y pasar al ataque pero no encontró con quienes hacerlo. El partido ya estaba en otra frecuencia. No refrescó al equipo ni aportó nada nuevo.

Ángel Correa: Entró por Julian Álvarez y estuvo incómodo como centrodelantero. Además, le llegó poco juego. Prueba no superada 

Foyth: Sustituyó a Montiel. Jugó contenido los 18 minutos que estuvo en la cancha.

Ocampos: Ingresó por Nicolás González. No pudo zafar del barullo del medio campo.

Guido Rodríguez: Reemplazó a Paredes para aguantar el final.