Una nena de 11 años de edad fue el 20 de marzo pasado al Hospital de General Mosconi, municipio del departamento San Martín, porque tenía fuertes dolores estomacales. Al ser revisada por un médico, se detectó que en realidad se encontraba en trabajo de parto. Ese mismo día la nena dio a luz a una beba que por ser prematura, dado que solo tenía 34 semanas, fue trasladada al Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal, ciudad cabecera del departamento norteño.  

Como era domingo, el médico que atendió a la niña radicó la denuncia por violación (como establece la ley) recién al otro día, y su madre lo hizo casi en simultáneo junto a otro familiar. La acusación recayó sobre el progenitor de la nena, quien ya se encuentra detenido acusado de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo en perjuicio de su hija. La causa está en manos de la fiscala penal de Violencia Familiar y de Género de Tartagal, María Lorena Martínez, quien solicitó cotejar los datos de ADN con muestras de la recién nacida y el acusado. 

La madre de la niña denunció a su concubino y progenitor de la nena por abuso sexual en reiteradas ocasiones desde 2021.

Esa fue la cronología de los hechos según el relato que la gerenta del Hospital moscoense, Carolina Serrano, hizo a Salta/12. La funcionaria afirmó que tras el parto, la nena estuvo internada por cinco días, lapso durante el cual, por pedido de las autoridades del Hospital, la Justicia ordenó una custodia.

"Nos sorprendió que la nena sea criolla", dijo Serrano al descartar que haya sido integrante de pueblos originarios. Respecto a su sorpresa, explicó que "es más difícil intervenir" cuando los casos se dan dentro de pueblos indígenas. Según dijo, estos temas suelen ser más "resguardados" al interior de la familia, y recién se conoce de ellos cuando las niñas entran al Hospital; aunque en este caso pasó exactamente así. 

El de esta niña es el segundo parto en menores de 15 años que se registra en el Hospital de Mosconi este año, y la tercera atención que se hace entre chicas de hasta esa edad, por abuso sexual. "En los dos anteriores el Hospital no intervino con denuncias, porque ya la habían realizado las madres de las chicas", dijo Serrano. Especificó que en el caso de la primera niña gestante se le dio la posibilidad de acceder a una Interrupción Legal del Embarazo (ILE), pero ella y su mamá decidieron continuar con el embarazo.

Según informó Serrano, la totalidad de profesionales de la Salud de ese Hospital son "objetores de conciencia", por lo que las ILE/IVE, en caso de solicitarlas, se deben realizar en el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal.

Según se pudo conocer por fuentes cercanas a la investigación, en el caso de la nena que dio a luz ahora, las autoridades de la escuela a la que asistía también hicieron la denuncia tras enterarse de que su alumna había concurrido al Hospital por dolores que resultaron de un trabajo de parto. De hecho, habría sido la primera institución en hacer la denuncia correspondiente, si bien las tres denuncias se hicieron casi de manera simultánea.

Inmediatamente, y tras conocer los hechos, se prohibió el acercamiento del progenitor a la familia y se está investigando si hubo abusos a otra niña más que convivía con el detenido. Mientras se afirmó que hay un equipo interdisciplinario que contiene a la nena frente a los hechos acontecidos.

115 niñas madres en 2020 

Según el Anuario Estadístico de Violencia de Género 2020 elaborado por el Observatorio de Violencia contra la Mujer (OVCM), aquel año en Salta 114 niñas de entre 10 y 14 años dieron a luz, y en el grupo de las llamadas "niñas madres" se sumó hasta una de entre "5 y 9" años, con la que el total llega a 115 nenas. Además, hubo 24 egresos por abortos entre niñas de 10 y 14 años, y dos muertes maternas entre chicas de 10 a 19 años.

Uno de los cuestionamientos que surgen cada vez que se conoce un caso como el que se registró ahora es la aplicación de la Educación Sexual Integral (ESI) en Salta. 

"No hay presupuesto específico ni tampoco estructura en el Ministerio de Educación" de la provincia, dijo Ana Pérez Declercq, una de las directoras del Observatorio, al ser consultada por Salta/12 sobre el monitoreo del dictado de la educación sexual integral (ESI) a nivel escolar. Afirmó que solo hay dos personas designadas por la cartera educativa provincial para hacerse cargo de esta capacitación, y la contratación de entre 6 o 7 más como monotributistas y con fondos nacionales para hacer los monitoreos y guiar en los contenidos y modalidad al momento de presentarlos.

Declercq indicó que si bien hay disposiciones de la provincia, como la de establecer un módulo de 40 minutos para la ESI o una resolución sobre respeto a la autopercepción sexual del alumnado del sistema educativo primario y secundario, "esto debe ser acompañado con capacitaciones". Entendió que en una sociedad donde hay una instalación fuerte de la cultura tradicional y machista, se debe trabajar aún con más capacitación sobre las leyes y normativas.

Respecto del caso puntual de la niña que fue madre tras una violación, sostuvo que "mas allá de la ESI, cuando hablamos de las niñeces, (las carteras de) Salud y Educación deben ser garantes de derechos y si la familia no detecta una situación de abuso la escuela es la que puede detectar y también Salud". En este último sector se afirmó que si bien existe un Protocolo de Detección de Violencia de Género para el sistema sanitario "solamente el (Hospital) San Bernardo (en la ciudad de Salta) lo está aplicando".