No es novedad para quien transite las calles de la Ciudad de Buenos Aires que cada vez hay menos taxis en circulación. “De 38 mil que éramos quedamos 13 mil”, sostuvo el titular de Taxistas Unidos, Marcelo Boeri. Desde el gremio lo atribuyen a que desde hace seis años, de manera sostenida, se permite el ingreso de aplicaciones como Uber, Cabify o Didi, que perjudican al servicio de taxis de la Ciudad.

"Rodríguez Larreta y su gobierno permitieron que ingresen, permitieron la competencia desleal, que flexibilicen, evadan y que fuguen dinero", sostuvo Boeri, quien también aclaró que desde las distintas asociaciones de taxistas hicieron varias denuncias por las irregularidades de estas empresas.

Para Boeri, esta situación demuestra que hay intención política de que el negocio de las aplicaciones perdure para transferir el servicio público de autos a manos privadas. Además, desde Taxistas Unidos aseguran que desde hace tres años existe una cautelar que obliga al Jefe de Gobierno porteño a encauzar esta situación ilegal y que ningún fiscal actúa de oficio ante la problemática.