El gobierno de Portugal bloqueó la venta de una casa de lujo de 10,4 millones de dólares por tener una "fuerte convicción" de que pertenece al multimillonario ruso Roman Abramovich, sobre quien pesa las sanciones económicas de las potencias occidentales contra Rusia, tras la invasión a Ucrania.

El ministro de Relaciones Exteriores portugués, Joao Cravinho,  aseguró: "Tenemos una fuerte convicción, que no ha sido completamente confirmada, la casa pertenece a Roman Abramovich". El canciller hizo declaraciones este sábado mientras participaba de una reunión de la OTAN en Berlín, según Reuters.

 “El desafío aquí es que muchos de los sancionados no tienen sus propiedades y bienes a su nombre", sostuvo el canciller. Se sabe que en este caso hubo un intento de venta de la propiedad, ubicada en el lujoso resort Quinta do Lago, en  Algarve, dos semanas antes de la invasión rusa a Ucrania.

El banco más grande de Portugal, Caixa Geral de Depositos, fue quien alertó a las autoridades sobre la venta Y el registro de la propiedad fue congelado: no se puede vender, alquilar o hipotecar, desde el 25 de marzo pasado, un mes después de la invasión a Ucrania, a pedido del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Según el portal Público, el expropietario del club de fútbol Chelsea, había intentado vender esa propiedad a través de la empresa Millhouse Views LLC, con sede en Delaware, que administra sus activos. Sin embargo, el vocero de Abramovich dijo que el magnate no poseía "ninguna propiedad en Portugal" y que "Millhouse Views LLC no está conectado" con él. "De hecho, nunca hemos oído hablar de esta empresa", agregó.

Abramovich fue  sancionado por el gobierno británico y la Unión Europea por sus vínculos con el presidente ruso, Vladimir Putin. 

El multimillonario obtuvo la ciudadanía portuguesa, en abril de 2021, mediante una ley que ofrece la naturalización a los descendientes de judíos sefardíes que fueron expulsados ​​​​de la península ibérica durante la Inquisición medieval. 

Hay una investigación sobre el otorgamiento de la ciudadanía y fue detenido un rabino responsable de la certificación que permitió a Abramovich obtener la ciudadanía portuguesa.