Quedó sin efecto el pedido de búsqueda y detención de la mamá que defendía la integridad de su hija en La Rioja. El caso "Arcoiris" es una investigación judicial que involucra sectores de poder de La Rioja y que hace un mes tuvo a más de 500 personalidades de distintos ámbitos reclamando justicia. Esta semana se juntaron nuevamente para apoyar a Manuela Calvo, una comunicadora que viene denunciando el caso. 

Luego de la lucha de distintas organizaciones y asociaciones junto con la Dirección de Acceso a la Justicia y el Ministerio de Seguridad de La Rioja pudieron frenar la medida que había impuesto la semana pasada la justicia. También informaron que están trabajando para buscar un esquema de abordaje que proteja el interés de la niña. 

La orden de detención por desobediencia a la autoridad por la que su abogada defensora, Élida Barrera, presentó una eximición de prisión ante el Juzgado de Violencia de Género y Protección Integral de Menores Nº 2, en el expediente caratulado “Desobediencia a la autoridad, impedimento de contacto con sus hijos menores con sus padres no convivientes”, se había dado a conocer la semana pasada. 

Arcoiris es una nena de 6 años que vive en la ciudad de La Rioja y a los 2 años, apenas pudo comunicarlo, le reveló a su mamá que era abusada por su abuelo paterno, quien tiene actualmente una restricción de acercamiento a su nieta.

Arcoiris, nombre ficticio para resguardar su identidad, pidió el mes pasado no ir más a la casa de su papá por haber sido agredida nuevamente en el mismo hogar donde fue abusada, lo que fue constatado por la policía técnica judicial de esa provincia.

Por eso el 20 de abril, la mamá de Arcoiris se presentó ante Asuntos Juveniles para dejar en una exposición constancia de que su hija expresaba que “no quiere ir a la casa de su padre porque tenía miedo”.

La madre decidió no enviarla más, incumpliendo el régimen de visitas establecido, ya que el padre intentaba revincular a Arcoiris con el acusado de ser su abusador, pasando por alto las prohibiciones de acercamiento que continuaban vigentes.

La abogada Giselle Videla, en ese entonces, explicó que desde 2018 la madre de Arcoiris realizó cuatro denuncias por abusos. "La niña relató claramente, en más de una oportunidad, ante distintas personas y profesionales intervinientes, ser agredida sexualmente por su abuelo paterno. Cada semana, con gritos y llantos dice que tiene terror a ir con su padre", admitió la letrada.

El reclamo por el caso de Arcoiris es acompañado por la sociedad de La Rioja, que mantienen una "sensación de impotencia por la impunidad en este caso" ya que "la familia del abusador mantiene vínculos con el poder político de la provincia", advierten desde la Campaña por justicia para Arcoiris.

El 29 de abril, luego de que más de quinientas personalidades y organizaciones de todo el país lanzaran una campaña para solicitar al Poder Judicial riojano que proteja a Arcoíris, la justicia consideró que la nena no había sido abusada.

El domingo pasado, la casa de Manuela Calvo, una de las periodistas que seguía y denunciaba el caso fue allanada y también se le prohibió el estreno de un corto que hablaba sobre abuso sexual infantil y reconciliaciones forzosas, lo que generó diversos repudios.