El Papa Francisco desmintió que esté pensando en renunciar.  "Quiero vivir mi misión hasta que Dios me lo permita", le confesó a obispos brasileños el Pontífice, dando por tierra con las versiones que circularon en los últimos días en algunos medios que señalaban que estaba por dar un paso al costado a raíz de los problemas de salud que lo aquejan. 

Así lo aseguró el arzobispo de Porto Velho (Brasil), Roque Paloschi, al portal de noticias del Vaticano. Contó que Francisco dijo que "tiene muchos desafíos, pero que no se le pasa por la cabeza lo que sale en la prensa" en referencia a su posible renuncia.

"Quiero vivir mi misión hasta que Dios me lo permita", afirmó el Papa, según relató Paloschi. En tanto que Lúcio Nicoletto, administrador diocesano de Roraima, señaló que los obispos brasileños vieron a Francisco con su "fragilidad", pero “también con una fuerza muy grande".

El Papa hizo estas declaraciones cuando habló sobre su salud con un grupo de obispos brasileños, quienes participaban de la visita que realizan cada cinco años al Vaticano.

De este modo, Francisco rechazó los rumores publicados en algunos medios sobre la posibilidad de una renuncia debido a sus problemas de rodilla que lo obligan a movilizarse temporalmente en silla de ruedas y que hicieron que debiera posponer algunos viajes, como el que tenía previsto a principios de julio a Congo y Sudan del Sur.