El director de la Policía Nacional Civil de El Salvador, Mauricio Arriaza, informó que, desde el inicio del régimen de excepción en el país, capturaron a más de 49.000 personas. "En esta semana de vacaciones, desarticulamos 10 campamentos de estructuras criminales y les incautamos más de 60 armas", señaló.

Por su parte, el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro, dijo que entre el 30 de julio y el 7 de agosto, hubo “6 días sin homicidios y de los 4 que han ocurrido en este mes, 3 ya están resueltos”. “Los salvadoreños han podido vivir las vacaciones más seguras de nuestra historia”, aseguró.

“Lo que hemos vivido en esta vacación es el reflejo que hemos tenido en materia de seguridad y sobre todo el compromiso de nuestros más de 45,000 agentes de la fuerza del orden entre Policías y Ejército”, añadió Villatoro.

Un 75% de las personas capturadas durante el régimen de excepción tienen “ficha de pandilleros” y de “colaboradores”, según una investigación realizada por el diario El Faro y difundida este martes. El medio de comunicación analizó 1.251 expedientes judiciales correspondientes a 690 personas, de las más de 49.000 detenidas.

Según la investigación, varios de los detenidos han sido dos veces juzgados por el mismo delito. Además, detalla que hay 459 personas detenidas con ficha de pandillero, 59 con ficha de colaborador y más de 60 personas detenidas “con criterios ambiguos”. Dentro de esta última categoría se encuentran los capturados por “estar nerviosos” o “tener una actitud sospechosa”.

En ese sentido, hay 14 personas detenidas por tener antecedentes, 33 por apariencia sospechosa, 3 por estar nerviosos, 2 por tener una actitud sospechosa, 2 por denuncias en redes sociales, 7 por denuncia anónima y 4 por sus tatuajes.

Denuncias de violaciones a los derechos humanos

El Salvador se encuentra en estado de excepción desde el 27 de marzo de este año tras una ola de asesinatos que dejó 87 víctimas en un fin de semana. En ese entonces, Nayib Bukele le pidió a la Asamblea Nacional que se aprobara el régimen de excepción para "restablecer el orden y la seguridad ciudadana".

La medida afecta los derechos a asociarse, a que una persona sea informada de las razones por las que es detenida, que la prisión por averiguación no puede exceder las 72 horas y que la correspondencia es inviolable.

El régimen de excepción ha sido cuestionado por organizaciones salvadoreñas e internacionales. Según medios locales, 63 personas murieron en los penales desde el anuncio de la medida, aunque no se cuenta con cifras oficiales.

La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) de El Salvador, registró 1.931 denuncias de violaciones a los derechos humanos durante el régimen. Asimismo, la organización de derechos humanos Cristosal aseguró que el 65% de las 808 denuncias que recibieron de capturas involucra a personas de las que se desconoce el paradero, por lo que podrían calificarse como casos de desapariciones forzadas.