Un joven que atropelló y mató a un policía cuando manejaba alcoholizado e intentó eludir un control en Mar del Plata fue condenado ayer a diez años de prisión efectiva, al ser encontrado culpable de “homicidio simple” por un tribunal local. La condena recayó en Lucas Carnero, de 22 años, quien el 21 de julio de 2015 atropelló y mató al policía Néstor Fabián Mendiola, de 33 años, en un control de alcoholemia.

El Tribunal Oral 1, integrado por los jueces Facundo Gómez Urso, Pablo Viñas y Aldo Carnevale, hizo lugar al planteo del fiscal Pablo Cistoldi y los abogados particulares damnificados y entendió que el accionar de Carnero constituyó el delito de homicidio simple, y no homicidio culposo, es decir sin intención, como planteó la defensora oficial María Laura Solari. Entre los elementos considerados por el tribunal para la sentencia está que se estableció que al momento del accidente conducía alcoholizado, con 1,44 miligramos de alcohol en sangre, y a una velocidad superior a la máxima permitida. Además, poseía un registro tramitado de manera irregular

El fiscal Cistoldi había pedido en su alegato doce años y medio de prisión para Carnero por homicidio simple, mientras que la abogada de la familia del policía, Luz Alonso Proto, había solicitado dieciséis años de cárcel.

En tanto, la defensa de Carnero había requerido una condena por homicidio culposo, delito que prevé una pena de entre tres y seis años, y no de ocho a 25 como contempla el homicidio simple.

El fiscal Cistoldi dijo a la prensa que la calificación como homicidio simple “tiene que ver con la cantidad de indicadores que tiene una persona que conduce un automóvil de que puede provocar una tragedia”. “Si manejo con alcohol en sangre, manejo en exceso de velocidad, hay un dispositivo de seguridad con funcionarios que están protegiendo a la sociedad y trato de evitarlos, se suman otros policías que quieren pararme y no freno, son todas cuestiones que uno evalúa”, sostuvo. “Hay que ver cuáles casos resultan como homicidio simple. Cuando uno empieza a ver los antecedentes en todo el país, hasta hace tres o cuatro años había contados casos con condenas por homicidios en siniestros viales”, agregó, al destacar que hay un cambio “cultural” en la consideración de la gravedad de esos delitos.

Familiares de Mendiola, entre ellos su madre y su hermana, presenciaron la lectura de la sentencia en los tribunales marplatenses. María Cardona, madre del policía muerto, dijo que llegó a tribunales con “la idea de que Carnero iba a quedar en libertad”. “Ahora Fabi va a descansar en paz, quiero que (Carnero) se pudra en la cárcel”, pidió, y dijo que hará todo lo posible para que el condenado no recupere la libertad antes de cumplir la pena.

En tanto, María Mendiola, hermana de la víctima, dijo que esperaba una condena mayor para Carnero, al afirmar: “Con 10 años no hago nada, ni aunque le dieran 50. A mi hermano no lo vuelvo a tener”. “Nuestra familia está destruida de por vida, pero hay muchas familias detrás de nosotros, como la de la nenita de 14 años (NdeR: hija de Mendiola, que al momento de la muerte de su padre tenía 11 años). Necesitamos que cambien las leyes, que sean más estrictas”, reclamó.