El presidente de Chile, Gabriel Boric, concretó este martes un profundo cambio de gabinete en el cual iba a estar incluida la Subsecretaría del Interior, actualmente ocupada por Manuel Monsalve, pero dio marcha atrás después de que la oposición hiciera fuertes cuestionamientos a quien pasaría a ocupar ese cargo, el integrante del Partido Comunista Nicolás Cataldo.

Tras el ingreso de Cataldo al Ministerio del Interior, Monsalve, del Partido Socialista, iba a ser designado secretario de Presidencia, con lo cual pasaría a integrar el Comité Político del gobierno. Monsalve ha ganado visibilidad en los últimos meses al convertirse en la cara visible del Interior, tras las varias polémicas protagonizadas por Izkia Siches, quien era su titular hasta este martes. 

La llegada de Cataldo a la subsecretaría había sido el único cambio en el gabinete que se oficializó antes de que comenzara el acto de esta tarde en La Moneda. Rápidamente los medios chilenos dieron cuenta de algunas publicaciones de Cataldo en su cuenta de Twitter, en donde calificó a integrantes de Carabineros de "torturadores" (en 2011) y en la que ha utilizado la palabra Wallmapu para referirse a la zona del sur del país.

El término Wallmapu es utilizado por los mapuches para las tierras que reivindican como propias tanto en Chile como en Argentina, por lo cual es rechazado por la derecha chilena. Las críticas a Carabineros y el uso de este término eran frecuentes en la izquierda chilena, sobre todo en integrantes del Partido Comunista, en particular antes de la llegada de Boric a la Presidencia.

La seguridad en el sur del país es considerada uno de los problemas más urgentes por la oposición y es uno de los temas más atendidos por el gobierno, según dijo Boric esta tarde en el discurso posterior a los cambios en el gabinete. La derecha incluso argumenta que la supuesta desatención del gobierno a este tema fue una de las razones, al menos parciales, de que el borrador de la nueva Constitución fuera rechazado en el plebiscito del domingo, por 62% de los votos.

El rechazo del documento ha generado una serie de reuniones de Boric con líderes partidarios y representantes institucionales para dar inicio a un nuevo proceso constitucional. La oposición se había negado a participar hasta que se conociera el cambio de gabinete, por lo cual estaba previsto que el encuentro fuera esta tarde. Sin embargo, al conocerse la inclusión de Cataldo, legisladores de la coalición opositora Chile Vamos dijeron que no asistirían.

El presidente de Renovación Nacional, uno de los partidos más importantes de Chile Vamos, el senador Francisco Chahuán, pidió a Boric que actúe "sin premura", con "temple" y "calma". "Lo que ha hecho el presidente... claramente es violentar los conceptos de orden público", dijo a CNN Chile. "El presidente no ha entendido el resultado del domingo, lo que los ciudadanos quieren es seguridad", reclamó.

Por su parte, legisladores del Partido Comunista rechazaron las críticas de la derecha a Cataldo y lamentaron la marcha atrás del gobierno antes de que esta se oficializara en el acto. "Tienen golpistas y torturadores" en sus filas, señaló la diputada Carmen Hertz, "es una vergüenza", que hagan críticas a esta designación, y "doblemente vergonzoso" que sean aceptadas por parte del gobierno. "La ultraderecha y la derecha no pueden estar pautando al gobierno, eso es inaceptable", subrayó. 

Si bien el ingreso de Cataldo finalmente no fue parte de los anuncios oficiales en el acto de La Moneda, por lo que se da por descontado que Monsalve será ratificado como subsecretario del Interior, Chile Vamos no confirmó su asistencia a un encuentro con el presidente.