La Justicia absolvió a los últimos cinco acusados por el homicidio de Matías Bragagnolo, el adolescente de 16 años atacado por una patota en Palermo en abril de 2006 y que murió a causa de un golpe en la cabeza. La decisión del Tribunal Oral de Menores (TOM) 2 fue tomada por unanimidad, y los fundamentos se darán a conocer el 24 de octubre. Los acusados actualmente son mayores de edad, pero tenían menos de 18 años cuando ocurrieron los hechos juzgados, hace más de 16 años. “No era lo que esperaba” porque "había pruebas suficientes" como para condenarlos, señaló Marcelo Bragagnolo, padre del joven, al conocer la sentencia.

La fiscalía había solicitado penas de un año y seis meses de prisión para dos de los acusados, y un año para los tres restantes, en todos los casos por el delito de "homicidio preterintencional”, recordó el abogado Jorge Álvarez Berlanda, representante del padre de la víctima. La querella había solicitado cinco años de cárcel para uno los hombres y cuatro para el resto; las defensas habían requerido la absolución.

”Me parece una muy mala señal para la sociedad que exista cierto grado de impunidad para aquellos que han actuado a través de una patota”, declaró el padre de la víctima tras conocer la resolución. "El sistema judicial es una de las grandes deudas que el país tiene con la sociedad, esto es una muestra más de eso. Un caso que tardó más de dieciséis años en resolverse no sé si pasa en muchas partes del mundo", añadió. El padre del joven también recordó que, durante la instrucción, “los abogados nunca aceptaron hacer la reconstrucción con la excusa de que había que cortar el tránsito sobre Figueroa Alcorta”.

El delito por el cual la fiscalía había solicitado condenas tipifica una conducta en particular: aquella que tiene lugar cuando el agresor actúa con intención de provocar lesiones a otra persona, con un medio idóneo para ello, y terminar provocándole la muerte.

En agosto de 2014, en un juicio previo, el TOM 3 condenó a otro joven a dos años y medio de prisión por el homicidio y a un policía llamado Luis Oscar Villegas a dos años por "vejaciones e incumplimiento de deberes de funcionario público”.

Bragagnolo murió el 9 de abril de 2006 a la madrugada, en la puerta de un edificio ubicado en Ortiz de Ocampo al 2800, donde compartía una fiesta con amigos. Junto a otros dos chicos, había salido para comprar bebidas, pero en el camino se topó con una patota integrada por los imputados, que comenzó a agredirlos. Bragagnolo y sus amigos, que eran menos que el grupo que inició la pelea, se retiraron al edificio. El policía Villegas, que estaba de guardia en la cuadra, se dirigió al lugar y luego de indicarle a Bragagnolo que se acostara en el piso, le aplicó golpes.