El volante campeón del mundo Rodrigo De Paul celebró este viernes el décimo aniversario de su debut en la Primera División del fútbol argentino, con la camiseta de Racing en un partido contra Arsenal de Sarandí, y escribió una emotiva carta que leyó para sus seguidores a través de un video en sus redes sociales.

"Mi primer partido oficial, ya son 10 años… ¡Que rápido pasó todo, cuánta nostalgia, cuántos momentos se me vienen a la cabeza, cuántas paginas escritas y cuantas por escribir! Gracias por estar del otro lado, vamos a por más", señaló el número 7.

En el video, el exRacing compartió fotos y videos con las camisetas que utilizó a lo largo de su trayectoria desde que surgió del emblemático Predio Tita Mattiussi de la Academia: Valencia, Udinese, Atlético de Madrid y la Selección Argentina.

La carta completa de Rodrigo De Paul

"No puedo borrar de mi cabeza los nervios en el micro camino a la cancha. Esa sensación tan extraña e increíble en la panza por saber que estaba a punto de cumplir el sueño que seguí desde que era un niño. En el camino que decidí transitar por cumplir mi sueño conviví con la incertidumbre de jamás saber si lo iba a lograr.

Tuve que entender lo que significa la responsabilidad, el trabajo, las emociones, la constancia, y sobre todo la presión y la mirada de los que están alrededor, eso para cualquier chico que decide esta profesión es muy difícil. Pero todo valió la pena.

Cada día levantarme para ir a entrenar. El olor a pasto, el vestuario, defender a mi país, y los momentos que me hizo vivir el fútbol son cosas que no se comparan con absolutamente nada.

Me da mucha nostalgia repasar cada momento de mi carrera.

Defiendo cada camiseta que me pongo como si fuera la última vez que la voy a usar. Así lo vivo, así me criaron y así será hasta el último día que salga a una cancha. Ese es el respeto y ejemplo que tengo para darles a cada hincha y cada persona que me sigue y acompaña a lo largo de tantos años.

A veces da miedo soñar en cosas casi inalcanzables. Pero la inocencia de un niño que jugaba en un barrio llamado Sarandí, hasta al hombre que le dieron la posibilidad de ponerle la camiseta número 7 de mi país, estuvo motivado por ser campeón del mundo. Por eso hoy me siento tan orgulloso de todos estos años.

Gracias a cada uno de todos los que me acompañaron en esta gran aventura que todavía le quedan muchas hojas por escribir. Vamos por más. Rodrigo".