El Tribunal de la Cámara en lo Criminal de Tercera Nominación de Catamarca condenó ayer al exsubsecretario de Acción Social de Catamarca, Víctor Brandán y al exministro de Salud, Pablo Doro, a las penas de 10 y 6 años de cárcel. La causa conocida como “compras directas”, se originó en 2003 durante el gobierno del Frente Cívico y Social y demoró 20 años en llegar a juicio.

La causa se inició por una denuncia del entonces diputado catamarqueño Fidel Sáenz. En la acusación el exlegislador daba cuenta de que en la gestión de Brandán se ejecutaron compras directas por $27 millones para asistencia social y más del 73% de estas contrataciones correspondían a un grupo de 10 empresas. Las firmas, se habían constituido ese mismo año con el objetivo de empezar a venderle al Estado, mientras que algunas tenían apenas un mes de creadas cuando se descubrió el fraude.

El área de Acción Social Directa, dependía en ese momento del Ministerio de Salud de la provincia, y por esta razón había relación entre los condenados y además quedaron involucrados el exencargado de depósitos, Omar Guillermo Martínez, y la exencargada del Servicio de Contaduría Carlina Argentina Zurita.

Tras el escándalo, los cuatro fueron imputados por delitos de fraude en perjuicio de la Administración Pública por administración infiel, en concurso ideal con el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. Durante el debate, Doro debió dar explicaciones por siete hechos y Brandán por 12 hechos en carácter de coautor responsable. Zurita y Martínez habían sido acusados como partícipes necesarios.

Tras dejar su cargo como Subsecretario, Brandán asumió como diputado provincial. En 2005, con entonces mayoría de legisladores del FCSyS en la Cámara baja, se rechazó el desafuero en contra de Brandán, quien mantuvo su cargo de legislador hasta el 2009.

La causa demorada por no poderlo imputar, se elevó a juicio por primera vez en junio de 2012, sin embargo, la medida fue apelada y así continuaron los vaivenes hasta febrero de este año en que finalmente se pudo concretar el debate.

Ayer, antes de escuchar la condena, Brandán aseguró su inocencia ante los jueces: "Quiero ratificar mi inocencia. No tuve intención de hacer daño al Estado, mi intención era ayudar a los más necesitados. Si Mauvecín (el fiscal de Cámara que mantuvo la acusación durante el juicio) me conociera; soy honorable, intachable, nunca tuve problemas hasta este maldito juicio, acusado por recortes de diario por estas compras directas. Si hubo errores no fue culpa mía", dijo.

El fiscal Miguel Mauvecín había pedido para Brandán una pena de 12 años, mientras que para Doro 7. Para Martínez y Zurita la absolución por el beneficio de la duda.

Ambos condenados permanecerán en libertad hasta que la sentencia quede firme.