El abogado de Cristina Kirchner en la causa por el intento de magnicidio de septiembre pasado, José Manuel Ubeira, advirtió que en el Poder Judicial “hay una suerte de cancelación” con la vicepresidenta y apuntó contra la jueza María Eugenia Capuchetti por dilatar la investigación por el intento de asesinato.

“Se sabe que hemos recusado en dos oportunidades a la jueza Capuchetti. No fue atendida en ninguna de las instancias locales. Ahora estamos con una queja ante la Corte que no creo que tenga mayor éxito”, dijo Ubeira por AM750.

En este panorama, lanzó: “No porque no tengamos razón, sino porque creo que hay como una suerte de cancelación con la vicepresidenta”. A la par, aseguró que Capuchetti sigue en el cargo a pesar de que, según su entender, por estas mismas acciones se hubiera apartado a cualquier magistrado.

Entre los motivos centrales, Ubeira señaló que la jueza cobrara un estipendio del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires “en una causa en la cual hay que investigar la actividad de la policía local”.

En concreto, el abogado se refería a que la jueza María Eugenia Capuchetti ejerce como investigadora senior en el Instituto de Seguridad Pública (ISPP), que no depende del Ministerio de Educación porteño, sino del Ministerio de Justicia y Seguridad.

Esto no es todo. Más allá de que de por sí esto marca una falta de imparcialidad, se le suma el dato de que en nueve años en el cargo, la jueza presentó un solo trabajo de investigación del que no hay registros de publicación.

No somos patrulleros de los jueces. Si la jueza hubiera cobrado un estipendio del Rotary Club, sería un problema disciplinario de la jueza y no tendríamos nada que decir. Ahora, el problema es que lo cobra de un organismo que no es ni más ni menos que el Ministerio de Seguridad y Justicia de la Ciudad de Buenos Aires”, comentó Uberia.

Luego, finalizó: “Es el ministerio que prestó custodia en esa calle, con esas vallas y los Copitos dando vueltas. Y donde hubo una serie de irregularidades que queremos que se investigue. Es una cuestión ética y de buen gusto que se aparte”.