El gobierno de México condenó una subasta que se realizará en Ámsterdam y en la que están incluidas 30 piezas arqueológicas del patrimonio cultural mexicano. Entre los objetos las autoridades identificaron piezas mayas, chontales y olmecas. 

Las autoridades mexicanas denunciaron la venta que se realizará este 10 de mayo e hicieron un llamado a la casa de subastas para que reflexione sobre la venta de bienes culturales obtenidos de forma ilegal. Además, elevaron la denuncia a la fiscalía nacional y también dieron un aviso a la Interpol. 

Los especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) determinaron que las 30 piezas que serán subastadas fueron “realizadas por tradiciones culturales como la maya, olmeca, chupícuaro y otras que se asentaron en los actuales estados de Colima, Nayarit y Veracruz”.

En una carta enviada por la titular de la Secretaría de Cultura, Alejandra Frausto, a la casa de subastas en Países Bajos, le hicieron un llamado a detener la comercialización de piezas históricas del patrimonio mexicano “tomando en consideración el valor histórico, simbólico y cultural de dichos bienes, superior a cualquier interés comercial”.

También le recordaron a la casa de subastas que existe legislación nacional y tratados internacionales respecto al tráfico ilícito de bienes culturales “ya que contribuye al despojo cultural y atenta contra la memoria de los pueblos”.

La De Zwaan, con sede en Ámsterdam, tiene previsto realizar la subasta “Arqueología, arte tribal y carteles de cine de Ghana”, en la que comercializarán objetos culturales de México, Perú, Ecuador, así como otras piezas de todo el mundo. En el portal web se puede ver el catálogo de piezas con precios que van desde 300 hasta 5.000 dólares.

Según la casa subastadora, las piezas fueron adquiridas por el matrimonio de los alemanes Ludwig (1919-2020) y Helga Jansen (1922-2017).

Una de las piezas más caras es una máscara de piedra verde tradicional de la cultura chontal, con un precio de salida de 3.000 euros y fechada entre los años 300 y 100, según informó el diario local La Jornada.

En el portal de De Zwaan describen esta pieza como un “clásico ejemplo de la cultura de las máscaras de piedra de los chontales”. Esta pieza estuvo en manos de Carlo TE Gay, luego pasó a un museo de arte precolombino en Munich y por último a manos privadas. Gay es uno de los investigadores más importantes de la cultural material en piedra en el estado de Guerrero y es autor de varios trabajos sobre estas piezas. 

En los últimos seis años México recuperó más de 11.500 piezas de su patrimonio nacional, en línea con la política del presidente Andrés Manuel López Obrador de priorizar estas acciones. Desde el Ejecutivo denunciaron otras subastas en ciudades como Nueva York, París y Roma donde también aparecen objetos robados o que son parte de los bienes culturales del país.